Las lluvias, que alcanzaron entre 600 y 700 milímetros en determinadas zonas de Ardèche, provocaron tres heridos leves en Auvernia-Ródano-Alpes. En París, un árbol cayó sobre una familia, cuyo padre no sobrevivió, sin que se estableciera formalmente el vínculo con el mal tiempo.
“En diez minutos había agua por todas partes”, cuenta Patricia Montagne, que vive en el centro de Annonay (Ardèche). “Empezaba a hacer olas y empezaron a llegar las trombas marinas”, cargando “cantidades asombrosas de madera”.
“En la memoria viva”
Las lluvias dieron lugar este jueves a impresionantes escenas. En Givors, al sur de Lyon, “las aceras son invisibles, el agua llega hasta las rodillas”, describió Samuel Barataud, de 25 años, vendedor de un comercio situado cerca de este afluente del Ródano, que se levantó de la cama.
La ministra de Transición Ecológica, Agnès Pannier-Runacher, esperada en Loira y Ardèche el viernes, habló de una situación “sin precedentes por su magnitud”. 600 milímetros de agua en el Ardèche son algo inaudito en la memoria viva” y vinculó “estos episodios al cambio climático”.
Según la prefectura regional, cerca de 900 personas tuvieron que ser evacuadas en Auvernia-Ródano-Alpes.
En Pont-Saint-Esprit, en Gard, un centenar de hogares situados a orillas del Ródano, cuyos niveles están aumentando rápidamente, también han tenido que abandonar sus hogares. Céline Laurent, madre de 38 años, estaba refugiada en el ayuntamiento del pueblo con sus tres hijos.
En Béziers, en Hérault, un rayo cayó sobre el techo del conservatorio de música y provocó su derrumbe. Los 60 estudiantes presentes fueron puestos a salvo, precisa la prefectura.
corte de carretera
Estos aguaceros provocaron importantes perturbaciones en las redes eléctricas y en el transporte. Este viernes, unas 4.000 viviendas siguen sin electricidad, la mitad de ellas en el Loira, las otras en Alto Loira, Ardèche y el Ródano, según un informe de Enedis de las 8.30 horas.
En vísperas de las vacaciones escolares del Día de Todos los Santos, las escuelas no abrirán en Ardèche, en 51 municipios del Ródano y en 39 del Loira.
El tráfico ferroviario se ha reanudado a lo largo de la costa de los Alpes Marítimos, pero sigue interrumpido en Occitania, especialmente en los alrededores de Toulouse, y entre Lyon y Saint-Etienne.
La autopista A47, sumergida por la crecida del río Gier, permanece cerrada en Givors, al sur de Lyon.
El bombeo de agua “ya está en marcha pero puede llevar mucho tiempo. El agua está turbia por los desechos. La otra cuestión es la evacuación de los vehículos y luego la limpieza y control de las estructuras y de la carretera en general”, según la prefectura.
Varias carreteras departamentales y nacionales quedaron cerradas debido a inundaciones o deslizamientos de tierra, al igual que la autopista A47 entre Lyon y Saint-Etienne.
es hora de limpiar
Limpiar el barro y las ramas de los árboles: el viernes llega la hora de la limpieza y la recesión después de los daños causados la víspera en numerosos municipios del Centro Este por unas lluvias excepcionales que alcanzaron hasta 700 milímetros en Ardèche.
