Quería ayudar a sus vecinos del otro lado de la calle a quitar los troncos atascados en un puente.
Las inundaciones son de una intensidad excepcional. La tormenta Boris azota Europa Central y ha dejado al menos once muertos y varias personas desaparecidas en Rumanía, Austria, Polonia y la República Checa.
En Jankovice (República Checa), una ciudad de 460 habitantes, un ciudadano desapareció en circunstancias trágicas. Según el medio de comunicación Blesk, el hombre de 54 años desapareció el sábado 14 de septiembre en medio de un arroyo. El río, crecido por las aguas de lluvia, inundó parte del pueblo. “El agua llegó a las casas por los puentes”, dijo al medio el alcalde Jaroslav Dvořák.
La víctima, que vivía en la localidad con su pareja desde hacía tres años, quiso “ayudar desinteresadamente a sus vecinos del otro lado de la calle a retirar los troncos que se habían quedado atascados en el puente”, según explicó el concejal. Después resbaló y fue arrastrado por el agua.
Los habitantes del lugar sólo lo vieron cuando luchaba contra la corriente. “Los bomberos intentaron atraparlo, pero fue en vano”, dijo el alcalde, antes de agregar: “(Él) gritó y luego desapareció bajo la superficie”. Según el funcionario electo, no hay confirmación de la muerte del hombre de cincuenta años, pero lamentablemente no hay señales de que haya sobrevivido.
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La situación es especialmente preocupante en la zona fronteriza con Polonia, donde gran parte de la ciudad de Opava ha sido evacuada debido al desbordamiento del río Opava. El jefe de la policía checa confirmó la primera muerte de una persona que “se ahogó en el río Krasovka cerca de Bruntal”, en el noreste del país, a unos 130 kilómetros de Jankovice.
