El técnico de la Lazio, Marco Baroni, hizo un mea culpa tras el impactante colapso de su equipo en casa contra el Inter de Milán.
Marco Baroni asume la responsabilidad de una derrota atroz
Los biancocelesti buscaban aprovechar sus recientes hazañas contra Napoli y Ajax venciendo a los actuales campeones italianos, pero en cambio se encontraron recibiendo los mayores golpes del año. Sorprendentemente, el Aquile perdió el partido por seis goles sin respuesta. Por tanto, Baroni asumió toda la responsabilidad del resultado en su entrevista posterior al partido con DAZN (vía La Lazio Siamo).
Lo siento por el equipo y la afición, asumo la responsabilidad. Jugamos unos buenos cuarenta minutos, pero no fue suficiente. El equipo se vino abajo. Hay cosas que no te puedes permitir hacer contra el Inter. No controlé al equipo desde un punto de vista emocional y por eso asumo toda la responsabilidad.
No a los demás
La Lazio ciertamente se vio obstaculizada por las circunstancias, que incluyeron la pérdida de Mario Gila por lesión y luego su reemplazo Samuel Gigot, lo que obligó a una línea de fondo improvisada, mientras que tuvieron la mala suerte de conceder un penalti por mano. Sin embargo, el gerente insiste en que estos incidentes no pueden justificar el sorprendente resultado.
Ya he hablado con los jugadores. Esto no le puede pasar a un equipo como nosotros, podría hablar de situaciones desafortunadas, pero es inútil. Perdimos los nervios. El equipo no puede desmoronarse así. Debe ser un accidente en el camino contra un gran equipo al que no se le puede dar espacio.
Explicando el resultado pesado
Sin embargo, el técnico de 61 años defendió su formación 4-2-3-1, insistiendo en que esa no fue la razón detrás de la catastrófica derrota.
Cuando jugamos con un jugador ofensivo entre líneas, el equipo crea situaciones importantes, también gracias al movimiento de los extremos. El ataque de nervios también se debe a la agenda apretada y a las piernas cansadas, pero no se puede perder así. Es la primera vez que pasa, pero no puede pasar contra un equipo que te castiga cuando te roba la posesión.
No se trata de formaciones. Nos hemos ampliado y estirado, algo que normalmente no hacemos y por eso todavía podemos jugar con cuatro jugadores ofensivos.