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La muerte de seis turistas extranjeros relacionada con un presunto envenenamiento masivo con metanol ha puesto en la mira a una pequeña ciudad del Sudeste Asiático que ha trabajado duro en los últimos años para deshacerse de su reputación de exceso.
Vang Vieng, un popular destino para mochileros en el norte de Laos, está en el centro de una tragedia que se está desarrollando después de que varias naciones occidentales, incluidos Estados Unidos y el Reino Unido, confirmaran que sus ciudadanos habían muerto en Laos en los últimos días y advirtieran sobre las consecuencias potencialmente fatales. de beber alcohol contaminado en el país.
Aunque las circunstancias completas de esas muertes aún no están claras, el vínculo con el presunto envenenamiento por metanol ha puesto a Laos y su vital industria turística en el centro de atención, y ha reavivado recuerdos del pasado reciente, a veces oscuro, de Vang Vieng.
Conocida por su impresionante paisaje kárstico y su ambiente relajado, la ciudad a orillas del río Song es un punto de parada idílico para los viajeros entre la capital, Vientiane, y la ciudad de Luang Prabang, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
“Descubierta” por viajeros occidentales con escasos recursos a finales de la década de 1990, la ciudad evolucionó rápidamente de una comunidad agrícola a un centro de fiesta hedonista.
Pero la fiesta se agrió cuando una serie de accidentes fatales relacionados con estándares deficientes de seguridad y una cultura de exceso a lo largo del río aparecieron en los titulares internacionales, lo que obligó a las autoridades locales a intervenir.
Desde principios hasta mediados de la década de 2000, Vang Vieng ganó una notoria reputación en la ruta de los “panqueques de plátano” del sudeste asiático por sus fiestas salvajes y su cultura de tubing en el río, junto con la amplia disponibilidad de alcohol barato y drogas ilícitas.
Laos ha intentado cambiar la imagen de Vang Vieng como un destino menos festivo. En 2012, el gobierno cerró muchos de los bares baratos que atendían a la multitud de mochileros y se convirtió en un lugar de moda para viajes de aventura y ecoturismo.
Vang Vieng y sus alrededores montañosos son una base para actividades al aire libre, como kayak, caminatas por la jungla, parasailing, tubing y escalada en roca. Y en los últimos años, la ciudad se ha vuelto popular entre una gama más amplia de turistas, especialmente entre familias y grupos de turistas de Corea del Sur y la vecina China.
Pero ahora, la cultura de la bebida en Vang Vieng vuelve a ser noticia.
A medida que surgieron informes de muertes de turistas en los últimos días, Nueva Zelanda, Australia, el Reino Unido, Canadá y Estados Unidos emitieron declaraciones instando a sus ciudadanos a tener cuidado con el consumo de alcohol en Laos.
“(Somos) conscientes de una serie de casos sospechosos de intoxicación por metanol en Vang Vieng, posiblemente a través del consumo de bebidas alcohólicas con metanol”, dijo la embajada de Estados Unidos en Vientiane en una alerta de salud el viernes. “Esté alerta al riesgo potencial de intoxicación por metanol, especialmente al consumir bebidas alcohólicas a base de alcohol”.
La alerta también aconsejaba a los viajeros en Laos “comprar bebidas alcohólicas y bebidas en licorerías, bares y hoteles autorizados”, no beber bebidas alcohólicas caseras y revisar las botellas en busca de signos de manipulación o etiquetado incorrecto.
La advertencia se produjo después de que el Departamento de Estado de Estados Unidos confirmara a CNN que un ciudadano estadounidense había muerto en Vang Vieng. No dio el motivo de la muerte de la persona, pero dijo que Estados Unidos estaba “vigilando de cerca la situación y brindando asistencia consular”.
El turismo es una fuente clave de ingresos para Laos, una nación sin salida al mar de alrededor de 7 millones de habitantes que es uno de los países más pobres del sudeste asiático y que va a la zaga de sus vecinos Vietnam y Tailandia en lo que respecta a atraer visitantes.
Según datos del gobierno de Laos, 2,6 millones de turistas internacionales visitaron Laos en 2024. Los tres grupos de visitantes más grandes son tailandeses, vietnamitas y chinos, con “otras fuentes notables” de visitantes entrantes de Francia, el Reino Unido, Rusia, Japón y Estados Unidos.
Este año se lanzó la iniciativa “Año Laos 2024” con el objetivo de atraer 4,6 millones de turistas y generar 712 millones de dólares.
Helen Regan, Isaac Yee y Eve Brennan de CNN contribuyeron con el reportaje.
