Ha pasado algún tiempo desde que el príncipe Andrés manchó su reputación tras varios escándalos. el estaba implicado en la polémica y los crímenes sexuales vinculados a Jeffrey Epstein y desde entonces le quitaron sus títulos reales en 2022. El hijo menor de la reina Isabel II y su hermano, Rey Carlos III por lo tanto no están en fase.
Nuestros colegas de Le Parisien informaron que el rey habría tomado una decisión importante a favor de su esposa, la reina consorte Camilla Parker Bowles, y en contra de su hermano, el príncipe Andrés. Esta decisión afecta a la Royal Lodge, una
“Casa señorial del siglo XVII en el bosque de Windsor“, como escribió Le Parisien.
El rey Carlos III favoreció a su esposa frente a su hermano, el príncipe Andrés
Como resultado, después de ser despojado de sus deberes reales en 2022, el príncipe Andrés también había sido
“invitado“ para abandonar la Logia Real. Es allí donde el príncipe reside desde hace unos veinte años y donde convive con su ex esposa, la duquesa de York Sarah Ferguson.
Como alternativa, el rey Carlos III le ofreció mudarse a Frogmore Cottage. Esta es la residencia en la que vivieron el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle antes de partir hacia Estados Unidos. Pero eso no es todo. Detrás de esta decisión se esconde en realidad un plan de futuro para la reina consorte Camilla Parker Bowles, que el propio rey puso en marcha al expulsar a su hermano de la Logia Real.
La Logia Real ahora está prometida a la reina Camilla
De hecho, la residencia ya no pertenecerá al príncipe Andrés, sino a la reina Camilla. Y esto después de que el rey Carlos III pensara en su futuro. La Logia Real está pensada como alojamiento real para la Reina Consorte en caso de que el Rey muriera, como explicaron nuestros colegas.
Con esta elección, el rey Carlos III prefirió favorecer a su esposa antes que a su hermano. El príncipe Andrés había sido acusado de agresión sexual y violación de una menor por parte de una joven llamada Virginia Giuffre. Manifestó que tenía 17 años al momento de los hechos alegados. Por tanto, habría sido una de las víctimas menores explotadas en relación con el tráfico sexual llevado a cabo por Jeffrey Epstein y su Ghislaine Maxwell.
