Ante el cáncer de su hija Kate, Carole y Michael Middleton son más que nunca pilares de la familia real.
El 22 de marzo, Kate Middleton anunció que tenía cáncer en un vídeo de Instagram, especificando que había iniciado un tratamiento de quimioterapia preventiva. Un emotivo discurso en el que la Princesa de Gales habló del apoyo incondicional de su marido, el príncipe Guillermo, y tuvo unas emotivas palabras hacia sus tres hijos, George, Charlotte y Louis. Un clan unido durante el calvario de la enfermedad, apoyado por otros dos miembros de la familia: Carole y Michael Middleton, los padres de Kate. De hecho, si estos últimos son discretos, trabajan en la sombra para proporcionar todo el apoyo necesario a su hija y a su yerno. Una cierta dedicatoria, que podría ser saludada por la propia familia real.
¿Un título oficial de conde y condesa?
De hecho, según el experto real Richard Eden, que habló en las columnas del “Daily Mail” hace unos días, es hora de que la monarquía honre a Carole y Michael Middleton. “La capacidad de William para continuar cumpliendo con sus deberes reales, mientras su padre también lucha contra la enfermedad, es un testimonio del apoyo que los Middleton le brindan. “Cada vez está más claro que los padres de Kate son tan importantes para el futuro de la monarquía como los propios Windsor, y creo que eso merece un reconocimiento oficial”, explica.
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