Minimalista en su forma, pero infinitamente grandioso en sus emociones, este espectáculo literalmente transportó a los espectadores.
El viernes por la noche, la compañía Gravity & Other Myths ofreció al público del escenario nacional de L’Arc una auténtica joya del circo contemporáneo con A Simple Space. Minimalista en su forma, pero infinitamente grandioso en sus emociones, este espectáculo literalmente transportó a los espectadores.
En un escenario refinado, sin decoración ni artificios, siete artistas superaron los límites de lo posible con un virtuosismo impresionante. Las acrobacias, realizadas a pocos metros del público, vibraron con una intensidad cruda y desarmadora. Cada movimiento parecía a la vez instintivo y preciso, cada desafío enfrentado demostraba una confianza absoluta entre los miembros de la compañía.
Pero más allá de las impresionantes actuaciones físicas, fue la humanidad la que brilló en el escenario. Los vínculos entre los artistas, su complicidad casi palpable, dieron a la muestra una dimensión profundamente conmovedora. No podíamos más que asombrarnos por esta perfecta comunión entre cuerpo, corazón y mente, y por la fuerza colectiva que emanaba de este pequeño grupo unido como un solo ser.
A Simple Space es mucho más que un espectáculo: es una celebración de la belleza humana, en su más deslumbrante sencillez. Una experiencia única y preciosa, que deja al espectador deslumbrado e inspirado.
© Manon Bollery