Leemos “El escuadrón volador” de Muriel Romana, encuentro con el ejército de bellas espías de Catalina de Medici

-

Muriel Romana es guionista. Entendemos su sentido de la puesta en escena y del diálogo. En este “Escuadrón Volador”, estas cualidades guían tanto el juego como a los personajes. Que abundan en torno a Catalina de Medici. También podemos reconocer allí a las acompañantes del Périgord, en particular a la más escandalosa y fantasiosa, Isabeau de Limeuil. De niña, languidecía a orillas del Dordoña, en su castillo de Lanquais, donde incluso las carpas daban vueltas en el foso sedimentado.


Muriel Romana,

Mateo Zazzo

Su prima la reina

Perdida la fortuna y la austera belleza de la casa agotada por un reciente incendio, la bendición para Isabeau, de sólo 16 años, fue ser prima lejana de la reina y, como tal, ser invitada a una boda real. Atrás quedaron las piedras en bruto de Bergeracois, aquí se lanza a la corte. Aún no alistadas en el escuadrón, esta bandada de señoritas encargadas por los Medici de espiar en las camas de los caballeros que las traviesas muchachas chillonas estaban empacando mientras desempaquetaban sus pequeños asuntos y los grandes del Estado. Una mujer, piensas, ¿qué sabe de política y de las intrigas de los poderosos… Isabeau de Limeuil, y éste es el tema de esta novela, demostrará a la reina, sin cálculos (un talento que le llegará más tarde ), por su energía y su temeridad: ¡cómo se atreve a cortar a su prima real! – que tiene el aplomo y la audacia de robar besos y confidencias bajo las sábanas de príncipes.

Isabeau de Limeuil demostrará que tiene el aplomo y la audacia para robar besos y confidencias bajo los edredones de los príncipes


El castillo de Lanquais, el “Louvre” del Périgord, reconstruido en estilo italiano por el tío de Isabeau de Limeuil.

Archivos Anne-Marie Sopkowitz

Galería de personajes

No se trata aquí sólo de Isabeau, sino también de Diana de Poitiers, Louise de la Béraudière, Madeleine de l’Estoile, Claudine de Clermont… Todavía nos encontramos con François Clouet, Brantôme, el poderoso Guisa, Condé (que Isabeau seducirá, seguro, y hasta un poco, en el segundo volumen), Montaigne, Ambroise Paré, Nostradamus y un número asombroso de nobles de alto y menor linaje procedentes de los confines de Aquitania, Périgord, Lemosín.

Desde la Venecia medieval de Marco Polo (su trilogía ha sido traducida a una quincena de idiomas) hasta Samara, la hija del desierto perdida entre los oros de Granada (“La Sultana andaluza”) en el corazón del Renacimiento, Muriel Romana recorre el envejece con increíble facilidad. El ensayista e historiador, que actualmente vive en Périgueux, nos invita a explorar las grandes y pequeñas epopeyas de la historia en sus aspectos excepcionales.

Ahora que Isabeau tiembla y se remanga las faldas en la corte, le queda a Muriel Romana contar el resto de las aventuras de esta chispeante Périgourdine, desde su tumultuoso romance con Condé, que la encontraba demasiado católica, hasta su matrimonio con el banquero toscano. Cerdeña. Esperamos.

“El escuadrón volador” de Muriel Romana, ed. Albin Michel, 352 p., 20,90 euros, libro electrónico, 9,99 euros. Muriel Romana estará en la feria del libro de Lanouaille (24) el 29 de junio.
Lea también “Isabeau de Limeuil, la escandalosa” de Périgourdine Isabelle Artiges, ed. de Boreas 2021, 371 p., 19,90 €, libro electrónico, 9,99 €.

-

PREV Príncipe Harry: “Desde la distancia…”, su muy significativa confesión sobre su salida de la familia real
NEXT Valady. Jean Couet-Guichot y Gaya Wisniewski, dos artistas residentes en la región