Tomado de alter.quebec
En un contexto donde “las voces palestinas son a menudo censuradas o luchan por ser escuchadas”, los curadores Ariane De Blois y Muhammad Nour ElKairy quisieron resaltar el trabajo de los artistas de origen palestino. Las doce obras presentadas en Plein Sud fueron elegidas por su relación con el lenguaje, tema central de la exposición.
“La exposición parte del principio de que el lenguaje es político”, explica Ariane De Blois en una entrevista para Plein Sud. Las obras expuestas utilizan el lenguaje como medio para visibilizar las realidades palestinas, cuestionando cuestiones como la identidad, la tierra, el exilio y el genocidio.
Sin embargo, el lenguaje adopta diferentes formas dependiendo de la obra: manuscrita, digital, audio, vídeo… Nos encontramos, por ejemplo, con la obra What the real carajo? de la artista Amal Al Nakhala, un diario de guerra que combina texto y bocetos sobre los desplazamientos forzados que sufrió junto a sus seres queridos. También está la obra Vibraciones de Gaza, en la que Rehab Nazzal filma a niños sordos relatando los bombardeos de las fuerzas israelíes. En otro registro se muestra un extracto del libro Los racistas nunca han visto el mar, de Yara El-Ghadban.
En términos de sonido, escuchamos en la sala de exposición los sonidos de drones militares y de un teclado digital tecleando, provenientes de dos obras distintas. Una atmósfera que mezcla los sonidos de la guerra y la escritura, sumergiendo al público en las cuestiones que plantea la exposición. En cuanto a la distribución del local, la sala única de exposición permite tener una visión general de todas las obras y desplazarse en la dirección deseada. El espacio fue diseñado como una “ágora”, un “lugar de encuentro” en torno a las voces y la imaginación palestinas, en palabras de los curadores de la exposición.
Un contexto particular
Al estar ubicada la sede Plein Sud en el Cégep Édouard Montpetit, la exposición acoge a numerosos estudiantes. La directora general de Plein Sud, Hélène Poirier, considera que este lugar se encuentra en un entorno escolar “realmente interesante”, dada la “misión educativa” del arte contemporáneo, a veces demasiado aislado y reservado a una “pequeña élite”. Entre los visitantes también se encuentran profesores y amantes del arte contemporáneo. A la exposición también acudían grupos de recién llegados a los estudios franceses, pero finalmente la visita fue cancelada debido a “demasiada carga emocional”.
Es “la primera vez que una de nuestras exposiciones es tan actual”, según Hélène Poirier. Aunque el arte contemporáneo aborda cada vez más cuestiones sociopolíticas, P for Palestina forma parte de un contexto geopolítico y mediático poco común para una exposición.
La exposición P for Palestina está abierta hasta el 14 de diciembre en el centro de exposiciones Plein Sud de Longueuil, y simultáneamente en el centro de artistas L’Œil de Poisson, en Quebec, hasta el 15 de diciembre.