En un mercado donde los precios no paran de subir, donde cualquier SUV urbano híbrido cuesta alrededor de 30.000 euros, donde un SUV puro de una marca no premium, como el Toyota Land Cruiser, cuesta más de 76.000 euros, modelos como el que hoy presentamos ser bien recibido.
Aunque parece un Suzuki Jimny en miniatura, el modelo de SUV pequeño del que vamos a hablar hoy es el VinFast VF3 2025. Es decir, se trata de un modelo vietnamita que llama la atención y que se puede adquirir a un precio muy reducido.
Y sí, es eléctrico, lo que sin duda le abriría las puertas a las principales ciudades europeas. De hecho, en determinados países del Viejo Continente, el VinFast VF3 contaría con la etiqueta medioambiental 0 de la DGT, lo que sumaría a su facilidad de aparcamiento, con una longitud inferior a los 3,2 metros.
Un coche eléctrico económico con diseño todoterreno
Ya vendido en varios países asiáticos, como el mercado local vietnamita y Filipinas, el VF3 hace de sus precios competitivos su principal atractivo de venta. De hecho, aquí el VF3 se vende a partir de 240 millones de dongs vietnamitas, el equivalente a unos 9.064 euros, en la versión con suscripción de batería.
¿En qué consiste esta solución? Es una forma para que los consumidores paguen un precio más bajo e incluyan baterías en un plan de suscripción mensual. Para aquellos que prefieran comprar la batería, el precio ronda los 12.140 euros, lo que sigue siendo una cifra muy interesante.
A pesar de su diseño todoterreno, el VF3 es un coche puramente urbano, un pequeño SUV de tres puertas, cinco plazas y unas dimensiones muy compactas, lo que lo hace ideal para la movilidad urbana.
Más allá de su diseño robusto y aspecto moderno, es el interior, aunque sencillo, el que resulta funcional y cuenta con una pantalla táctil central para controlar las principales funciones del vehículo. El maletero tiene una capacidad de 285 litros, que se puede ampliar abatiendo los asientos traseros.
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En términos de prestaciones, el VF3 alcanza los 100 km/h y está propulsado por un motor eléctrico de 43 CV, alimentado por una batería de litio-hierro-fosfato (LFP) que ofrece una autonomía de hasta 210 km, según el fabricante.
La batería se puede recargar del 10% al 70% en aproximadamente 36 minutos. Buenos datos en conducción urbana, aunque antes de sacar conclusiones hay que compararlos con el ciclo WLTP europeo.