Los periodistas presentes en el entrenamiento de Dragons el lunes tuvieron que esperar muchos minutos antes de poder reunirse con Linden Vey. A su llegada, los jugadores ya habían regresado al vestuario después de haber avanzado en su entrenamiento para permitir que el hielo del BCF Arena vistiera los colores de la Liga de Campeones. Por tanto, el canadiense se presentó vestido de civil ante los medios de comunicación, sosteniendo en sus manos una pequeña figura de Mario Kart. “Tengo que devolvérselo a mi hijo”, sonríe este padre de tres hijos cuando un periodista le pregunta qué es.
Linden Vey, de 33 años, llegó a Friburgo el pasado jueves tras abandonar Rusia y realizar una breve visita a su Canadá natal. “Ha sido un largo viaje hasta aquí”, afirma el delantero, que rescindió su contrato con el HK Avangard Omsk por motivos familiares. “Poder estar en casa todas las noches es algo especial”, explica sin dar más detalles sobre el tema. Antes de su marcha, este central anotó 19 puntos en 20 partidos de la KHL esta temporada (7 goles y 12 asistencias).
Linden Vey, ahora instalado con su familia a orillas del Sarine, está listo para volver al servicio después de varias semanas alejado del hielo. “Rápidamente nos damos cuenta de cuánto extrañamos el hockey. Es un placer estar de vuelta en el hielo, con los compañeros de equipo y en el trabajo”. Con el número 92, debutará con los Dragones el martes, durante el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones contra los Växjö Lakers (19:45). Su misión: ayudar al Fribourg-Gottéron a clasificarse tras la derrota por 1-0 en Suecia la semana pasada.
Un lugar para tomar
“Todavía tendremos que tener paciencia mientras se orienta”, dice Pat Emond. El entrenador de los Dragones podría alinear al exjugador del ZSC Lions (10 partidos disputados durante la temporada 2017/18) junto a Christoph Bertschy y Killian Mottet. Por su parte, Lucas Wallmark, inseguro tras haber sido golpeado en la cabeza por un patín de un árbitro el sábado en Davos, también podría jugar contra la selección sueca. En cualquier caso, Pat Emond no tendrá que designar un extranjero supernumerario, al no estar limitado el número de importaciones en la Liga de Campeones.
Con siete extranjeros bajo contrato, habrá que tomar una decisión de cara al resto del campeonato. “No deberíamos esperar un cambio de rumbo”, advierte Pat Emond. “Jacob Lilja ha marcado dos goles en los dos últimos partidos, y eso no es poco. Nuestros dos defensores extranjeros también están actuando muy bien. Así que es un feliz dolor de cabeza”, concluye el quebequense con una sonrisa.
Radio p. -Leo Martinetti
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