Eddy Merckx, cinco veces ganador del Tour de Francia, es hoy unánime en su estatus de leyenda. No siempre ha sido así.
Hace cincuenta años, en 1974, Eddy Merckx ganó su quinto Tour de Franciadespués de haber reinado ininterrumpidamente en la Grande Boucle entre 1969 y 1972. Hoy en día, considerado fácilmente como el mayor corredor de la historia del ciclismoel belga apodado alguna vez el Caníbal o el Ogro sufrió, sin embargo, una gran impopularidad durante su época de esplendor.
En una larga entrevista concedida estos días a L’Equipe, Eddy Merckx recuerda este período atormentado. “ Había pasado todos estos años en un clima de hostilidad, particularmente en Francia, donde recibí amenazas de muerte para dejar ganar a Poulidor. La gente me insultó, me escupieron e incluso me tiraron piedras durante la París-Roubaix. Mi dominio inquietó a gran parte de los medios de comunicación franceses, en particular a los de la televisión, e incluso a los organizadores del Tour. »
“Temo a la multitud”
Celoso, odiado, Eddy Merckx admite haber llegado incluso a cambiar sus planes profesionales ante esta ola de odio: “ Si decidí no correr el Tour en 1973 fue precisamente para escapar de esta atmósfera agresiva. Desperté demasiada antipatía y tuvimos que calmar las cosas. Pero en Bélgica tampoco agradaba a los partidarios flamencos de Godefroot y De Vlaeminck, y lo mismo sucedió en los Países Bajos debido a Zoetemelk. Al comienzo de un critérium, un aficionado holandés me acusó de tomarme por Dios. Sin embargo, nunca quise este estatus… »
El icono de 78 años, ahora alabado hasta los cielos, hoy ya no acepta su estatus. “ Eso me molesta. Nunca me gustó ser el centro de atención, respondiendo entrevistas. Hace mucho que no voy a carreras porque tengo miedo a las multitudes. Me siento oprimido, especialmente cuando tengo que detenerme para pedir autógrafos o selfies. Siempre me sorprende que la gente todavía me reconozca después de todos estos años. Aquí es donde me digo a mí mismo que dejé una huella.
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