Antes del partido del Rugby Championship en Johannesburgo entre Sudáfrica y Nueva Zelanda el sábado 31 de agosto, los fuegos artificiales y la música interrumpieron el final del haka de los All Blacks. La Unión Sudafricana de Rugby se disculpó con su homóloga neozelandesa por el incidente, lo cual fue aceptado.
El incidente ocurrió “debido a dificultades de programación y un simple error humano”, dijo el presidente de SA Rugby, Rian Oberholzer, en un comunicado el 2 de septiembre. “Nunca fue nuestra intención programar algo para que coincidiera con un momento tan icónico en un partido contra los All Blacks. Este desafortunado incidente de ninguna manera representa una falta de respeto por parte del rugby sudafricano hacia la importancia y la historia del haka”, agregó.
Los All Blacks, por su parte, dijeron que las interrupciones no fueron interpretadas como una falta de respeto. “Sinceramente, a veces hay un poco de caos” en torno al Haka, dijo el entrenador asistente de los All Blacks, Jason Ryan, a los medios neozelandeses en Ciudad del Cabo.
Aplausos malinterpretados
Antes de cada partido, los jugadores de Nueva Zelanda realizan el haka, una danza guerrera maorí tradicional que consiste en golpear el pecho o los muslos de sus oponentes. El haka, que se remonta a la primera gira de los All Blacks “originales” por Europa en 1905, se realiza después de los himnos nacionales y justo antes de que comience el partido.
La coreografía de los Hombres de Negro suele ser esperada y respetada por el público, pero los momentos finales del haka en Ellis Park se mezclaron con música, fuegos artificiales y un avión volando sobre el estadio.
Según relatos sudafricanos, un ingeniero de sonido interpretó erróneamente los aplausos de los aproximadamente 62.000 espectadores como una señal de que el haka había terminado y reinició la música.
En el aspecto deportivo, Sudáfrica se impuso por 31-27. El domingo 8 de septiembre está previsto un nuevo enfrentamiento en Ciudad del Cabo.
Artículo original publicado en RMC Sport
