El pintor, utilizando una técnica única y minimalista, crea cuadros mágicos de paisajes navideños en escaparates. Antes de una exposición a gran escala en la primavera de 2025 en la Maison des Consuls del pueblo medieval de Matelles (34).
“Si te fijas bien, es un reflejo del paisaje en el que nos encontramos, ya que el dibujo no tiene sombra, es como si pasáramos de una dimensión a otra”.. Esta dimensión es la de las celebraciones navideñas, donde los escaparates de las tiendas alesianas expresan el talento del artista François Secrève.
Desde noviembre, necesariamente lo habéis observado, dibujando aquí un lago atrapado bajo el hielo, allá un majestuoso ciervo o incluso este unicornio con su inmaculado vestido blanco. Precisamente el tema del proyecto final de esta temporada de invierno para el propietario y colega del café Bastien del café Before de la Place de l’Abbaye. Siempre con esa preocupación por la pureza, por un ritmo en la superposición de formas que provoca una técnica singular impulsada por pintura blanca, rodillo de espuma y navaja de vidriero, fruto de muchos años de práctica.
“Es un poco como tiza Conté blanca sobre un soporte oscuro, explica el pintor. Podemos formar zonas planas, degradados, exploramos la textura con una técnica que en definitiva es bastante sencilla. Y cuanto más avanzamos hacia la simplicidad, más nos deslizamos hacia la complejidad.
Todo el arte y el camino del niño, hijo de una familia con sensibilidad artística, cuya pintura se convertirá en su pasión. Contra viento y marea. Un autodidacta que ha pasado por todas las técnicas y expresiones, incluida la noticia de una exposición de grandes pinturas de paisajes, el próximo mes de abril en la Maison des Consuls del pueblo medieval de Matelles (34), destaca con una piedra blanca en sus agendas…