DayFR Spanish

Normalización suspendida de la cuestión palestina.

-

– Anuncio –

Arabia Saudita e Israel continúan explorando vías para un acercamiento histórico, bajo los auspicios de Estados Unidos. Si bien varios países del Golfo ya han dado el paso mediante acuerdos de abrahamRiad mantiene una posición más prudentecondicionando cualquier normalización oficial a progreso concreto sobre la cuestión palestina. Este requisito coloca a Israel ante un dilema estratégico: seguir su política regional y al mismo tiempo responder a las demandas sauditas, esenciales para llegar a un acuerdo.

La posición saudí se estructura en torno a dos principios clave: el relanzamiento de una proceso diplomático creíble para los palestinos y el fin de actividades de colonización en Cisjordania. Para Riad, la normalización no puede concebirse sin gestos tangibles a favor de solución de dos estados. Este discurso contrasta con el enfoque pragmático adoptado por los Emiratos Árabes Unidos y Bahréin, que habían aceptado la cooperación con Israel a pesar del estancamiento de la cuestión palestina.

El interés estratégico de Riad
Arabia Saudita no oculta sus intereses estratégicos en este enfoque. Al posicionarse como el líder del mundo árabeRiad busca preservar su credibilidad ante las poblaciones árabes y no aparecer como un país que renuncia derechos palestinos. La monarquía saudí también desempeña un papel central en el mantenimiento de una estabilidad regionalparticularmente ante la creciente influencia de Irán.

Israel representa un aliado potencial en varios niveles:

  1. Seguridad regionalparticularmente frente a las amenazas comunes que plantean los grupos armados apoyados por Teherán.
  2. Cooperación económicacon oportunidades en los sectores de energía, tecnología e innovación agrícola.
  3. Proyectos energéticoscomo la interconexión de infraestructuras de gas y electricidad, que unen a Israel con los Estados del Golfo.

Sin embargo, para Riad, estos beneficios económicos y estratégicos sólo son posibles si se encuentra un equilibrio con las demandas palestinas, que siguen siendo una símbolo político y de identidad inevitable.

La respuesta de Israel: entre el pragmatismo y la resistencia
Del lado israelí, la respuesta a las condiciones saudíes sigue teniendo matices. Por un lado, los líderes políticos israelíes reconocen la importancia estratégica de un acuerdo con Riad, capaz de redefinir la mapa geopolítico regional. Sin embargo, la cuestión palestina sigue siendo un punto de conflicto importante en las negociaciones.

Para parte de la coalición gubernamental israelí, cualquier concesión sobre la colonización en Cisjordania se considera un compromiso inaceptable. Esta posición debilita el margen de maniobra de los negociadores israelíes, especialmente porque las facciones políticas internas continúan abogando por una expansión territorial en Judea y Samaria.

Sin embargo, signos de pragmatismo emergente. Discusiones discretas se centran en medidas simbólicas, como aliviar las restricciones económicas en Cisjordania o reanudación de la financiación para proyectos de infraestructura palestinos. Estos gestos, aunque limitados, podrían satisfacer los requisitos mínimos de Riad preservando al mismo tiempo los equilibrios internos de Israel.

El papel de Estados Unidos: ¿catalizador u obstáculo?
Estados Unidos, un actor importante en las negociaciones, desempeña un papel central para facilitar esta normalización. Washington ve en un acuerdo entre Israel y Arabia Saudita una victoria diplomática importante, fortaleciendo el eje regional contra Irán y consolidando la posición estadounidense en Medio Oriente.

Sin embargo, la administración estadounidense enfrenta desafíos importantes. Por un lado, debe convencer a Israel de que acepte acciones concretas a favor de los palestinos, sin provocar una crisis política interna. Por otra parte, debe garantizar que Riad obtenga garantías suficientes para justificar su acercamiento a las poblaciones árabes, particularmente sensibles a la cuestión palestina.

Posibles escenarios: ¿hacia un compromiso?
Están surgiendo varios escenarios para el futuro de las negociaciones entre Israel y Arabia Saudita:

  1. Un acuerdo pragmático : Israel acepta medidas limitadas (económicas y humanitarias) para los palestinos, permitiendo a Riad avanzar sin perder prestigio.
  2. El bloqueo : Las exigencias sauditas, consideradas excesivas por Israel, llevan al estancamiento de las conversaciones.
  3. Un acuerdo ampliado con concesiones recíprocas : Se relanza un proceso diplomático más amplio, que implica un progreso político tangible para los palestinos y una normalización formal entre Israel y Riad.

En cualquier caso, un posible acercamiento entre Israel y Arabia Saudita sigue siendo una paso clave para el futuro de Oriente Medio. Podría rediseñar las alianzas regionales e imponer nuevas equilibrios políticos en torno a la cuestión palestina.

– Anuncio –

Related News :