La autoridad francesa de competencia anunció el jueves que había sancionado a diez fabricantes y dos distribuidores de electrodomésticos por colusión en materia de precios. Tendrán que pagar un total de 611 millones de euros en multas por mantener precios más altos entre febrero de 2007 y diciembre de 2014. Según el comunicado, las empresas sancionadas son: SH, Candy Hoover, Eberhardt, Electrolux, Whirlpool (como sucesora de Indesit), LG, Miele, SEB, Smeg, Whirlpool, Boulanger y Darty.
El objetivo de estos acuerdos era “reducir la competencia, particularmente de los distribuidores en línea, y mantener altos precios de venta para los consumidores“, especifica la Autoridad. Los medios puestos en marcha van desde la prohibición de la venta de determinados productos en Internet hasta la comunicación “precios de venta recomendados” por los fabricantes con “un lenguaje codificado para ocultar instrucciones de precios“, seguido de un “vigilancia” para garantizar que los distribuidores los respeten. Los distribuidores activos exclusivamente en Internet afirmaron haber sido discriminados si no tenían tiendas físicas.
Darty y Boulanger especialmente destacados
“Los distribuidores tradicionales, incluidos los dos principales, Darty y Boulanger, participaron plenamente en estos acuerdos.“, subraya la Autoridad de Competencia, insistiendo en la “peso“de los dos gigantes que intentaron garantizar eso”Los productos que vendieron no serían significativamente más baratos en otros lugares, particularmente en línea.“. Fnac Darty indicó en un comunicado aparte que el importe de su multa asciende a 109 millones de euros. El grupo había provisionado, desde el primer semestre de 2023, 84 millones de euros en previsión de esta sanción y anunció el jueves que “registrará un cargo adicional de 24 millones de euros para el ejercicio 2024, sin impacto en los ingresos de explotación actuales“.
Como otras nueve personas, Fnac Darty había decidido no impugnar la denuncia notificada por la Autoridad de Competencia por “finalizar rápidamente un procedimiento complejo“y dedicarse a lo suyo”plan estratégico“. El fabricante SEB y el distribuidor Boulanger optaron por impugnar las denuncias y fueron multados con 189,5 y 84,35 millones de euros respectivamente.
En un comunicado de prensa, la SEB indicó que “presentará una apelación“ante el Tribunal de Apelación de París, rechazando”cualquier alegación de que sus prácticas no cumplían las normas de competencia“. Electrolux indicó en un comunicado que había tomado nota de la sanción (44,5 millones de euros), provisionada en sus cuentas a partir de 2023. Una primera sanciónpor un importe total de 189 millones de euros, se pronunció en 2018 en el mismo caso contra seis de los fabricantes afectados por la decisión del jueves.