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Explosión de buscapersonas en Líbano: ¿Cómo colocaron las trampas explosivas?

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Tras la explosión de miles de buscapersonas en Líbano el martes, Israel está en el punto de mira. Pero, ¿cómo se han convertido en trampas estos aparatos, fabricados en Hungría? La teoría de una acción secreta durante la fabricación parece la más probable.

Explosiones simultáneas, 9 muertos y más de 2.700 heridos. En Líbano y Siria, los buscapersonas utilizados por miembros del Hezbolá explotaron al mismo tiempo el martes. El movimiento chiita libanés acusa a Israel de haber lanzado esta operación. Pero, ¿cómo lograron estos aparatos transformarse en pequeñas bombas? ¿Eran trampas explosivas? ¿Cómo y cuándo? Una fuente cercana al movimiento declaró a la AFP que “los buscapersonas que explotaron pertenecen a un envío recientemente importado por el Hezbolá de 1.000 aparatos”, que parecen haber sido “pirateados en origen”. El fabricante taiwanés Gold Apollo negó haber fabricado los buscapersonas, tras una información del New York Times que citaba a este grupo como proveedor de los productos. Luego afirmó que fueron producidos y vendidos por su socio húngaro BAC.

Para Fabrice Epelboin, profesor de Sciences Po y especialista en tecnologías digitales y ciberseguridad, hay dos posibilidades. “O bien hubo una interceptación del envío, pero dada la cantidad de buscapersonas, parece complicado interceptarlos, transformarlos y reenviarlos sin provocar retrasos que habrían atraído las sospechas de Hezbolá. O bien hubo una infiltración del fabricante. En este caso, el fabricante taiwanés explica en esta fase que no fabricó ellos mismos estos buscapersonas, sino que sería un subcontratista europeo”. ¿Con una intervención de los servicios secretos israelíes en esta fase? “Probablemente fue allí donde hubo una infiltración del Mossad que, en la fábrica, transformó un simple buscapersonas en una pequeña bomba portátil”, estima Fabrice Epelboin.

El método parece bastante simple, pero es de alto nivel, según este experto. “Se introduce una pequeña dosis de explosivo. Se modifica el software que controla el buscapersonas para integrar un tipo de detonador que se activará a distancia al recibir un mensaje específico. Se piratea la logística de comunicaciones de Hezbolá para enviar un mensaje a todos los buscapersonas que se desea hacer estallar. Es menos espectacular que sobrecalentar la batería, pero sigue siendo una operación de alto nivel y muy bien dirigida”.

El invitado de Charles Matin: Cientos de buscapersonas explotan en el Líbano – 18/09

¿“Complicidad” en las redes iraníes?

Frédéric Encel, doctor en geopolítica y profesor en Sciences Po, también cree que había un explosivo escondido en los buscapersonas. “Es probable que estas pequeñas cajas rudimentarias hayan sido provistas de una trampa explosiva durante su fabricación, que es muy fuerte”, subraya en Apolline Matin, en RMC. “Si el proceso de fabricación pasó por Irán o por redes iraníes de una forma u otra, eso significa claramente que hay una colusión en el seno de este famoso eje de resistencia, que incluye a Irán, que lo dirige, a las milicias iraquíes y a Hezbolá”.

Y considera que sólo Israel es capaz de llevar a cabo una acción semejante. “Esto es evidente porque ninguna otra fuerza estatal o subestatal es capaz o ha demostrado ser capaz de proceder de esta manera. Y, por otra parte, Hezbolá es un enemigo implacable del Estado judío, desde su creación y, más concretamente, desde las masacres perpetradas por Hamás el 7 de octubre”.

El invitado de hoy: Frédéric Encel – 18/09

Pero ¿podrían Hezbolá y sus partidarios en Irán haber evitado este ataque? “Habría sido necesario desmontar un buscapersonas, darse cuenta de que la batería, que sin duda estaba muy bien camuflada, había sido sustituida por otra, o hacer ingeniería inversa del software del buscapersonas para darse cuenta de que había sido modificado”, explica Fabrice Epelboin. “En la práctica, parece muy complicado tener una seguridad tan paranoica. Puede que la NSA la tenga, pero normalmente los servicios de inteligencia franceses no la tienen. De lo contrario, Emmanuel Macron nunca habría utilizado un iPhone. Además, Hezbolá nunca utilizaría un iPhone porque sabe muy bien, a diferencia de la presidencia francesa, que los servicios israelíes pueden interceptar todo lo que hay en un iPhone”.

Laurent Picado Periodista deportivo de RMC

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