El miércoles se alcanzó un acuerdo de tregua entre Israel, Hamás y la Jihad Islámica. En particular, prevé la liberación de 33 rehenes frente a un millar de palestinos.
La desolación y la angustia dieron paso a la celebración y la esperanza. Con el anuncio del acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Israel y Hamás, miles de palestinos se regocijaron en toda la Franja de Gaza, casi todos cuyos 2,4 millones de habitantes huyeron de sus hogares para tratar de escapar de los combates y los bombardeos.
En particular, se observaron escenas de alegría en Khan Younes, en la Franja de Gaza, con una persona blandiendo banderas palestinas.
En Tel Aviv, en la Plaza de los Rehenes, que lleva el nombre de los ataques del 7 de octubre, los residentes oscilan entre la precaución y la nueva esperanza. Un estado de ánimo compartido por la prima de Shiri Bibas, secuestrada con su familia, entrevistada por nuestra corresponsal especial BFMTV Clémence Dibout.
“Es muy duro, muy difícil en un momento para nuestra familia porque todavía no sabemos si están en Gaza”, dijo. “No tenemos noticias, nadie ha tenido contacto con ellos”.
“Siempre tenemos la esperanza, la esperanza de volver a verlos lo antes posible y con vida”, añadió la prima de Shiri Bibas.
Gaza: se logra un acuerdo de alto el fuego – 15/01
Un acuerdo en dos fases
En una primera fase, 33 rehenes deberían ser liberados, empezando por mujeres y niños, a cambio de un millar de palestinos detenidos por Israel, según dos fuentes cercanas a las negociaciones.
La segunda fase se referirá a la liberación de los últimos rehenes, “soldados y hombres en edad de reclutamiento”, así como a la devolución de los cuerpos de los rehenes muertos, según el Times of Israel.
Sin embargo, un funcionario israelí advirtió el martes que Israel “no abandonará Gaza hasta que todos los rehenes hayan regresado, los vivos y los muertos”.
Las conversaciones se intensificaron de cara al regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, principal aliado de Israel, el 20 de enero, en medio de una mayor presión internacional sobre las distintas partes. Donald Trump prometió recientemente un “infierno” para la región si los rehenes no eran liberados antes de su regreso.
Hugo Garnier Periodista BFMTV