Dos hombres lo atacaron el 1 de enero con la tapa afilada de una lata de atún, cortándole en la cara y el cuello, informó este viernes el diario británico “The Sun”.
La policía de Londres ha confirmado que está investigando el ataque a un “prisionero de 43 años, cuyas heridas no ponen en peligro su vida” en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, al sureste de Londres. Un portavoz de la administración penitenciaria también confirmó la agresión a un preso sin identificarlo.
El padre y la madrastra de Sara Sharif, Beinash Batool, de 30 años, fueron condenados a mediados de diciembre a cadena perpetua en Londres por el asesinato de la pequeña. El juicio de estos torturadores conmocionó al Reino Unido, tanto por la violencia infligida a Sara como por las oportunidades perdidas que podrían haberla salvado. “No es exagerado calificar de tortura lo que sufrió la pequeña”, declaró el juez, recordando uno a uno los insoportables abusos que le infligieron.
El tío de Sara, Faisal Malik, de 29 años, que vivía con la pareja en Woking (suroeste de Londres), fue condenado a 16 años de prisión por “provocar o posibilitar su muerte”.
