Escena totalmente lunar, el jueves en Jeddah (Arabia Saudita), durante las Next Gen ATP Finals. Durante su derrota en tres sets (4-2 4-3 4-2) ante el francés Arthur Fils (ATP 20) contando para la fase de grupos, el checo Jakub Mensik (ATP 48) vivió un momento intemporal.
Después de perder el segundo set, el joven de 19 años abandonó momentáneamente la cancha para aliviar un impulso natural. Esta pausa para ir al baño, que se suponía era sólo una formalidad, terminó curiosamente alargándose.
Cuando regresó al campo, el derecho nacido en Prostejov parecía particularmente irritado y se lo hizo saber al árbitro del partido. ¿El motivo de su descontento? Los funcionarios encargados de realizar los controles antidopaje le pidieron que se sometiera a un control. Ellos, obviamente poco atentos al desarrollo del juego, no eran conscientes de que el partido aún no había terminado…
Sorprendido por la revelación del alto checo (193 cm, 83 kg), el presidente alertó inmediatamente al supervisor del torneo sobre este incidente, tan inusual como embarazoso. Este último, como era de esperar, admitió en sus zapatos que se trataba de un error.
Derrotado durante sus dos primeras salidas en estas Next Gen ATP Finals, Jakub Mensik librará una nueva batalla el viernes contra el brasileño João Fonseca (ATP 145). No estoy seguro de que se atreva a pedir otro descanso para ir al baño…