Investing.com – BlackRock (NYSE:) Investment Institute (BII) ha identificado y como diversificadores potenciales para protegerse contra las ventas de acciones, señalando que las opciones de diversificación tradicionales, como los bonos, se han vuelto menos efectivas.
En un documento detallado titulado “Perspectiva global 2025”, el BII destacó los distintos impulsores de valor de , incluida su oferta fija y su potencial para una adopción más amplia como sistema de pago.
“El papel de Bitcoin como depósito de valor y sistema de pago lo convierte en un diversificador potencial”, dijo Samara Cohen, directora de inversiones (CIO) de ETF e inversiones indexadas en BlackRock.
La limitada correlación histórica del activo con las acciones refuerza aún más su potencial de diversificación.
“La correlación de Bitcoin con las acciones mundiales sigue siendo limitada, incluso con picos ocasionales. Dados sus impulsores de valor únicos, no vemos ninguna razón intrínseca por la que Bitcoin deba correlacionarse con activos de riesgo importantes a largo plazo”, dice el informe de BlackRock.
Sin embargo, la compañía advierte que su perfil riesgo-recompensa podría cambiar significativamente si bitcoin logra una adopción generalizada, acercando su utilidad a la del oro.
El metal precioso sigue desempeñando un papel clave en las carteras, especialmente a medida que los bancos centrales aumentan sus reservas del metal en medio de presiones inflacionarias.
BlackRock señala que el desempeño del oro como cobertura contra la inflación ha ganado fuerza, particularmente cuando las monedas de reserva tradicionales enfrentan desafíos.
“El oro se ha disparado a medida que los inversores buscan fortalecer sus carteras contra una inflación más alta y algunos bancos centrales buscan alternativas a las principales monedas de reserva”, dice el informe.
“Creemos que es esencial monitorear el desempeño de estas alternativas en comparación con las clases de activos tradicionales y utilizarlas con flexibilidad.
De manera más general, el BII enfatiza que son los cambios estructurales, no los ciclos económicos habituales, los que determinan la dinámica del mercado, el crecimiento estadounidense y la desaceleración de la inflación que desafía las expectativas convencionales. Los mercados siguen siendo volátiles porque malinterpretan estos cambios.
Para 2025, BlackRock espera que la inflación se mantenga por encima del objetivo debido a las tensiones geopolíticas, las inversiones en inteligencia artificial y el envejecimiento de la fuerza laboral. Los modestos recortes de las tasas de interés de la Reserva Federal y el aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro subrayan la necesidad de carteras dinámicas y diversificadas.