El mercado eléctrico está acostumbrado a sufrir efectos secundarios en términos de precios. Si los fabricantes alimentaron la guerra de precios durante el invierno pasado, el leasing ecológico contribuyó en gran medida a desestabilizar el segmento, con alquileres a veces inferiores a los 100 euros al mes.
La batalla comercial liderada por los nuevos participantes chinos como MG, y retransmitida en particular por la estadounidense Tesla o la japonesa Toyota, podría experimentar un nuevo episodio en las próximas semanas. En cuestión, la entrada en vigor de los indicadores CAFE. Se espera un nuevo nivel el 1 de enero. El objetivo será reducir las emisiones medias de CO2 a 81 g/km por fabricante, es decir, una cuota reducida del 15%.
Doble venta de vehículos eléctricos
Para alcanzar ese umbral calculado sobre todas las ventas de VN, los fabricantes no tendrán otra opción que vender un vehículo eléctrico por cuatro vehículos térmicos, recordó este otoño Jean-Philippe Imparato, director de Stellantis Europa. Un muro denunciado por Luca de Meo, director del Grupo Renault.
Porque si la realidad cuestiona a los observadores, también cuestiona a los fabricantes. La tasa de penetración eléctrica ronda actualmente el 12%. Y las perspectivas no son muy favorables dada la reducción de las ayudas a la compra en Francia, después de Alemania. La oportunidad de señalar que el futuro arrendamiento social no debería entrar en vigor antes del segundo semestre del año.
¡Se alquila desde 79 euros!
Para los fabricantes comprometidos con la democratización del vehículo eléctrico a través de modelos de 20.000 euros, los precios de venta estarán en el centro de los debates el próximo año. Dependiendo de las bonificaciones y aportaciones aplicables, el Leapmotor T03 ya está disponible a 79 euros al mes gracias a una promoción del fabricante hasta el 31 de diciembre. El Citroën ë-C3, por su parte, tiene un precio de salida de 19.300 euros. ¡Fiat, por su parte, duplica el bono ecológico el día 500!
La estrategia comercial se beneficia del uso de baterías LFP (litio-hierro-fosfato) y de precios favorables de las materias primas. Recordemos que el precio medio de un vehículo eléctrico a día de hoy sigue siendo de 42.000 euros.
Los valores residuales vuelven a estar en el centro de los debates
Por tanto, a la espera de la llegada de los coches microurbanos que se esperan de Volkswagen y Renault con el Twingo E-Tech, es innegable que se utilizarán valores residuales. De hecho, representan el único parámetro real para lograr una renta global atractiva. Con el riesgo una vez más de exponer a los distribuidores a valores de reventa inconsistentes cuando regresen las recompras. Una situación que hoy lleva a Stellantis a apoyar financieramente la reventa de modelos eléctricos usados.
El problema del valor de reventa de los BEV también afecta a toda Europa. El tema se destacó durante la Cumbre Europea de Concesionarios de Automóviles, organizada por Auto Infos este otoño.
Pero para los fabricantes, parece obvio que la estrategia consistente en aumentar las ofertas de LOA para vehículos eléctricos nuevos costará menos que arriesgarse a fuertes multas por parte de Bruselas. Desde la liquidación hasta la guerra de precios, el vals de las etiquetas ya está programado.