El portavoz de la Defensa Civil, Mahmoud Bassal, dijo que los rescatistas encontraron 18 cadáveres antes del amanecer, mientras que decenas de personas resultaron heridas.
Entre los muertos había cuatro personas que murieron en un bombardeo a una casa en el centro de la ciudad de Gaza. Otras cuatro personas murieron y ocho resultaron heridas en un ataque contra una tienda de campaña que albergaba a decenas de desplazados en Deir el-Balah, una ciudad en el centro del territorio palestino, según la misma fuente. Mahmoud Bassal dijo que al menos tres niños estaban entre los muertos.
Por la tarde, el portavoz afirmó que otro ataque dirigido a la escuela Ahmed bin Abdoul Aziz en Khan Younes, en el sur de la Franja de Gaza, dejó más de 12 muertos, entre ellos niños, y 35 heridos. También dijo que seis personas murieron en un ataque a una casa en Al-Shoujaiya, al este de la ciudad de Gaza.
Contactado sobre los distintos ataques, el ejército israelí confirmó en un comunicado el domingo que había llevado a cabo ataques en las zonas de Beit Hanoun y Beit Lahia. “En Beit Lahia, las tropas israelíes eliminaron a terroristas y localizaron y desmantelaron grandes cantidades de armas, incluidos explosivos y decenas de granadas”, dice el comunicado.
En otra declaración, el ejército informó que había atacado una clínica en el norte de Gaza, diciendo que los combatientes de Hamás la utilizaban como “centro de mando y control”, así como como lugar de almacenamiento de armas.
“Escasez”, “martirio”
Bassal confirmó la muerte del periodista de Al Jazeera en la huelga en el campo de Nusseirat, que también costó la vida a tres socorristas de la Defensa Civil. Este es el quinto periodista de Al Jazeera asesinado desde el inicio de la guerra en Gaza el 7 de octubre de 2023.
El ejército, por su parte, afirmó que este periodista había sido comandante de la Jihad Islámica en esta zona.
Fue desencadenado por el ataque sin precedentes perpetrado ese día por el movimiento islamista palestino Hamás en Israel, que provocó el desplazamiento dentro del territorio palestino de la gran mayoría de los 2,4 millones de habitantes, a menudo en múltiples ocasiones. El ejército israelí lleva varias semanas llevando a cabo operaciones militares en el norte de la Franja de Gaza, cuyo objetivo cree que es impedir el reagrupamiento de los combatientes de Hamás. El ejército afirma haber eliminado allí a decenas de “terroristas”.
Los combates también provocaron víctimas entre el personal sanitario, agravando aún más la situación del sistema sanitario en la Franja de Gaza sumida en una grave crisis humanitaria tras más de catorce meses de guerra. “Estamos sufriendo una escasez de personal médico debido a los ataques y el martirio de un gran número de médicos y enfermeras”, dijo a los periodistas desde la Franja de Gaza Hossam Abou Safiyeh, director del Hospital Kamal Adwan en el norte.
Dijo que los ataques aéreos y los bombardeos de artillería continuaron teniendo como objetivo el hospital y sus alrededores, exacerbando la crisis y poniendo en peligro tanto a los pacientes como al personal médico.