Este sábado 14 de diciembre tuvo lugar una tragedia sin precedentes en el norte, entre Wormhout y Loon-Plage.
Un joven de 22 años, Paul D., mató a tiros a cinco personas en poco más de una hora, antes de acudir a la gendarmería. La investigación encomendada a la policía judicial deberá esclarecer las circunstancias y motivaciones de este quíntuple asesinato. Esto es lo que sabemos sobre las víctimas.
Paul Dekeister, 29 años, director comercial en Wormhout
La primera víctima de esta tragedia, Paul Dekeister, director de la empresa de transporte por carretera “Dekeister Frères”, fue asesinado a tiros delante de su pareja, delante de su casa en Wormhout. Este joven líder empresarial estaba involucrado en la vida comunitaria local y era un hombre de familia. El alcalde de la localidad, David Calcoen, expresó su tristeza: “Perder a uno de los suyos, un padre, es un shock para todo el pueblo. »
Aurélien Cugny, 33 años, guardia de seguridad en Loon-Plage
Aurélien Cugny perdió la vida en Loon-Plage, en la zona portuaria de Dunkerque. Agente de seguridad de la empresa ECS, patrullaba en coche con su colega cuando se encontraron con el asesino. Bien conocido por los habitantes de Dunkerque, fue una figura emblemática de la seguridad durante los acontecimientos locales. Sus allegados le rindieron homenaje en las redes sociales, describiéndolo como “un tipo grande con un corazón de oro”.
Marc Lehmus, 37 años, guardia de seguridad y entusiasta de las motos.
Marc Lehmus, colega de Aurélien Cugny, también fue asesinado a tiros durante este tiroteo. Este padre de dos hijas vivía en Bourbourg y era miembro activo del Moto-club du Littoral. La presidenta del club elogió “su amabilidad y su disponibilidad”, un homenaje que refleja el dolor de sus familiares y amigos.
Mustafa, 19 años, migrante kurdo iraní.
Luego, el asesino atacó a dos inmigrantes kurdos cerca de las vías del tren en Loon-Plage. Mustafa, de 19 años, vivía en el campo de inmigrantes de la ciudad, donde residen alrededor de 600 exiliados que esperan llegar a Inglaterra. Su muerte despertó gran emoción entre los refugiados y las asociaciones.
Ahmid, 30 años, migrante kurdo iraní.
Ahmid, también kurdo iraní, fue asesinado junto con Mustafa. Ambos hombres recibieron disparos a quemarropa. Los inmigrantes de la zona se reunieron para presentar sus respetos y colocaron rosas rojas en el lugar del tiroteo.
Un asesino aún misterioso
Paul D., el sospechoso de 22 años, acudió él mismo a la gendarmería de Ghyvelde tras el incidente. Aunque confesó los asesinatos, sus motivos siguen sin estar claros. Apasionado del tiro deportivo, era dueño de las armas encontradas en su vehículo. Sin que la policía lo sepa, se enfrenta a cadena perpetua por estos crímenes de rara violencia.
La investigación, dirigida por la división contra el crimen organizado del SIPJ 59, deberá determinar los elementos precisos que llevaron a esta tragedia que enluta al residente de Dunkerque.