Ha pasado casi un mes desde que se aplacó la ira de la sociedad civil marroquí, e incluso del pueblo marroquí en su conjunto. ¿La razón? El atraque, la primera semana del pasado noviembre, de un buque de guerra israelí en el puerto de Tánger para reabastecimiento.
Transportando armas de guerra, por tanto destinadas al bombardeo de los Ghazaouis, este barco, recordemos, recibió por primera vez una negativa del gobierno español sobre una posible operación de atraque en las costas ibéricas. En cualquier caso, en Marruecos han seguido lloviendo reacciones hostiles a tal decisión del Makhzen.
Asociaciones (como el Grupo de Acción Palestina), activistas de derechos humanos o ciudadanos de a pie… basta decir que la indignación fue generalizada. Una opositora marroquí, en este caso Dounia Filali, actualmente refugiada en Francia, declaró, en su canal de YouTube de gran audiencia, que al mostrar tal permisividad hacia el gobierno belicista israelí, el rey Mohammed VI, quien en principio debe representar al reino sherifiano en su conjunto, es él mismo culpable de complicidad en el genocidio contra los habitantes de Ghaza, especialmente desde que la Corte Penal Internacional (CPI) surge emitir órdenes de arresto contra Benyamin Netanyahu y su ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, por “crímenes de guerra” y “crímenes contra la humanidad”.
¿Y preguntarse si con tal acto, y en su calidad de Jefe de Estado marroquí, Mohammed VI perderá su inmunidad soberana y tendrá que rendir cuentas por haber hecho a su país culpable de tan vergonzosa complicidad? Según varios expertos, el Estatuto de Roma de la CPI es absolutamente ineficaz para proteger a los jefes de Estado que deben rendir cuentas o para explicar una acusación de crimen de guerra o incluso de complicidad en crímenes de guerra.
Lo menos que podemos decir es que tal permisividad, y en un momento en que el mundo entero hace sonar la alarma sobre el destino reservado a los palestinos, al menos, en opinión de los expertos, el jefe del reino de Shereef es responsable, a corto plazo, a un procesamiento internacional. Precisamente por esto, un número cada vez mayor de asociaciones piden una consulta para activar mecanismos internacionales con el fin de iniciar un proceso contra el rey.
Recordemos que, sobre todo para protegerse de una audiencia posterior a nivel de la justicia internacional, España se ha negado categóricamente, y en numerosas ocasiones, a dar su autorización respecto del atraque de barcos israelíes cargados de municiones y armas. armas destructivas en sus costas.
Este “aplaventrismo” de los responsables marroquíes ante el gobierno israelí basta para despertar la ira del pueblo marroquí, que siempre ha mostrado su adhesión a la causa palestina, especialmente en este año que acaba de pasar, en el que la Franja de Gaza ha sido la principal objeto de lo que algunos llaman una “limpieza étnica adecuada”, ya que el número de muertes, que hoy asciende a casi 50.000, continúa día tras día día, para aumentar.