Con más orgullo que fútbol, más momentos épicos que recursos tácticos, y una insólita aparición de Teon Koopmeiners acompañada de un magnífico disparo de Mbangula desde fuera del área en el minuto 93, el conjunto turinés consiguió un valioso empate, evitando lo que podía haber Ha sido una derrota catastrófica.
La Juve, a pesar de remontar un 0-2 en contra y terminar el partido en un clímax emocionante, sufre un problema persistente desde hace varias semanas. Después de un buen comienzo de temporada, el equipo dirigido por Motta ahora lucha por encontrar la versión eficiente de sí mismo que lo convirtió en un candidato al título.
Atrás quedaron los días en que eran serios retadores al título. La Juve es ahora sexta, a siete puntos del líder, con un partido más jugado que el Bolonia. La diferencia podría ampliarse a ocho si el Nápoles vence a la Lazio.
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Esta distancia parece cada vez más difícil de superar cuando aún les quedan seis meses de competición por delante. No es sólo la gran cantidad de lesiones lo que sin duda ha obstaculizado sus actuaciones; es que el equipo perdió gran parte de su confianza en el camino, disminuyendo su identidad. Ya no son tan sólidos defensivamente como al principio de temporada.
A medida que pasan los partidos, la Juve se muestra cada vez más tensa y frustrada, luchando por obtener los resultados necesarios en esta situación crítica. De hecho, Motta fue expulsado por protestar, encarnando la presión que siente un equipo desesperado por responder rápidamente para volver a la carrera por las plazas de la Liga de Campeones. El ‘Scudetto’ es, de momento, un sueño lejano.
Una parte importante de esa frustración pertenece al Bolonia, el antiguo equipo de Motta, ahora bajo la dirección de Vincenzo Italiano. Después de un mal comienzo de temporada, el Bolonia va en ascenso. En la primera parte, sorprendieron al Juventus Stadium con un gol de Ndoye, un cohete desde el lado derecho del área que Perin no pudo alcanzar.
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La Juve intentó responder y tuvo dos claras oportunidades de igualar. Sin embargo, primero Fagioli envió una buena oportunidad por encima, cuando estaba en una posición perfecta en el punto de penalti tras un pase hacia atrás, y luego Vlahovic vio su volea detenida por Skorupski. Una primera parte decepcionante terminó con una nota amarga para la Juve, que también perdió a Cambiaso, uno de sus jugadores en forma, por lesión.
La Juve no estuvo a la altura y sufrió otro revés inmediatamente después del descanso. Pobega anotó, pero lo más destacado del gol vino del argentino Santiago Castro, quien dio una increíble asistencia de tacón. El partido parecía decidido, pero ‘La Vecchia Signora’ supo recomponerse.
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La Juve respondió con un gol de Koopmeiners apenas diez minutos después de encajar el segundo gol del Bolonia. Conceicao aprovechó la profundidad de Danilo y el brasileño envió un balón raso al punto de penalti que Koopmeiners convirtió.
Entonces entraron Yildiz y Mbangula en busca del heroico empate. Sus entradas inyectaron nueva energía al ataque y, en el último momento, Mbangula, un canterano de 20 años, disparó un cohete para colocar el balón en la escuadra superior y salvar el partido. Sin embargo, para la Juve, que lleva un mes sin ganar en la Serie A, la lucha por el ‘Scudetto’ parece cada vez más inalcanzable, con las plazas de Champions ahora como principal objetivo.
