Inmediatamente enviaron dos patrulleras “para intentar rescatar” el barco, así como una tercera para prestar asistencia, pero una de ellas fue “bloqueada” por los barcos de la guardia costera china.
Por altavoz, la guardia costera taiwanesa pidió la “liberación inmediata del barco pesquero” a sus homólogos chinos, quienes les dijeron “que no interfirieran”, según la misma fuente.
“Para evitar una escalada del conflicto, decidimos detener la persecución” del barco, explicó la guardia costera taiwanesa, precisando que el barco se encontraba ahora en el puerto chino de Weitou.
Este último indicó durante una rueda de prensa el miércoles que a bordo del barco se encontraban dos taiwaneses y tres indonesios.
Este fue incautado a unos 21 kilómetros de la ciudad china de Jinjiang, en una zona donde Beijing había decretado una “moratoria de la pesca” entre el 1 de mayo y el 15 de agosto, afirmó el jefe adjunto de la Guardia Costera taiwanesa, Hsieh Ching-chin.
“Esperamos que la parte china nos informe lo antes posible de los motivos de la inspección”, dijo.
Otro funcionario de la guardia costera taiwanesa dijo que entre 50 y 60 barcos estaban presentes en la zona y que el barco pesquero taiwanés podría haber sido “elegido al azar”.
