“El hogar sigue siendo el lugar más peligroso” para las mujeres, ya que el 60% de ellas han sido víctimas de “su cónyuge u otros miembros de su familia”, señala este informe de la Oficina de Viena de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y la organización neoyorquina ONU Mujeres. Eso es 140 cada día o uno cada 10 minutos.
Un fenómeno “que traspasa fronteras, afecta a todas las categorías sociales y grupos de edad”, siendo el Caribe, Centroamérica y África las regiones más afectadas por delante de Asia.
En el continente americano y en Europa los feminicidios son perpetrados principalmente por la pareja, mientras que en el resto del mundo son los familiares los que están más implicados.
Violencia “arraigada”
Muchas víctimas denunciaron violencia física, sexual o psicológica antes de morir, según los datos disponibles en determinados países, entre ellos Francia. “Esto sugiere que muchos asesinatos podrían evitarse”, subraya el estudio, por ejemplo mediante “medidas judiciales de cesación”.
En las regiones donde es posible establecer una tendencia, la tasa de feminicidio se ha estancado o disminuido ligeramente desde 2010, lo que demuestra que esta forma de violencia “está arraigada en prácticas y normas” y es difícil de erradicar, señala la ONUDD que analizó la cifras recopiladas en 107 países.
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