El coste de las baterías de los coches eléctricos podría estar cerca de una caída importante. Esto es lo que revela un nuevo estudio de Goldman Sachs, que analiza la evolución futura.
El estudio confirma una muy ligera caída del precio de la batería por kWh entre 2022 y 2023. Durante este período, el kWh perdió una media de 4 dólares, pasando de 153 dólares a 149 dólares.
Pero el análisis pretende dar confianza en una gran caída que se producirá entre 2024 y 2026. Según esto, el precio del kWh rondará los 110 dólares este año. Sobre todo, la mayor predicción es un movimiento por debajo del límite de 80 dólares en 2026.
Según Goldman Sachs, es entonces cuando los coches eléctricos bajarán de precio. Y más precisamente, cuando se supere este punto, las ‘cero emisiones’ valdrán el precio de la energía térmica.
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El estudio explica que hay dos razones principales para este drástico descenso ya visto y por venir. La primera es la evolución de las tecnologías, con mejores técnicas celulares. Esto ayuda con la densidad energética, permitiendo una reducción del precio.
La otra razón es la caída del coste de las materias primas para la fabricación de baterías. Esta reducción, que comenzó en 2022, se prolongará hasta 2030. Debería representar el 40% de la reducción de los precios de los vehículos.
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