(GETTY IMAGES NORTEAMÉRICA/BRANDON BELL)
Las existencias de petróleo registraron un aumento sorpresa la semana pasada, según información publicada el miércoles por la Administración de Información Energética (EIA) de Estados Unidos, que también destacó una caída de la producción.
Las reservas comerciales de crudo aumentaron en 500.000 barriles en la semana que terminó el 15 de noviembre, mientras que los analistas esperaban una ligera caída de 85.000 barriles.
Este incremento está, en parte, ligado a la desaceleración de las refinerías, que sólo utilizaron sus instalaciones al 90,2% de su capacidad, frente al 91,4% de la semana anterior.
Otro factor explicativo es una nueva aceleración de las importaciones (+18% en una semana), que alcanzaron la semana pasada un nivel que no se había visto en cinco meses y medio.
Las exportaciones también aumentaron (+27%), pero no tanto, en volumen, como las importaciones.
En la semana se registró una clara caída en los volúmenes de productos refinados entregados al mercado (-8%), cifra considerada como un indicador implícito de la demanda.
La gasolina, en particular, mostró signos de debilidad (-10%), al igual que la categoría propano/propileno, que incluye productos derivados destinados a la industria.
El informe de la EIA también destacó una sorpresiva contracción en la producción de crudo, cayendo a 13,2 millones de barriles por día, frente a 13,4 en el período anterior.
Se trata de la producción más modesta en dos meses, mientras que el mercado está preocupado por el nivel demasiado alto de la oferta mundial en comparación con la demanda, especialmente en China.
Tras la publicación, los precios registraron una brevísima caída, antes de recuperarse. Alrededor de las 16:20 GMT, el barril de American West Texas Intermediate (WTI) para entrega en diciembre subía ligeramente un 0,37%, hasta 69,65 dólares.