El oro sigue siendo una moneda.

El oro sigue siendo una moneda.
El oro sigue siendo una moneda.
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En esta tabla, de Trading Economics, se ven los déficits (columna Gobierno/Presupuesto) y las tasas de crecimiento (columna Crecimiento del PIB). Técnicamente, un país cuya deuda existente es mayor que el PIB y que programa un déficit mayor que el crecimiento de su PIB no puede pagar su deuda existente; sólo puede pagar intereses creando dinero.

Esta es la razón por la que el oro está alcanzando actualmente tales niveles.

Como Henry señala a menudo en sus columnas, el reciente aumento de los mercados bursátiles mundiales es ilusorio cuando se compara el valor de las acciones con la moneda real, el oro. La “ganancia” de los índices expresados ​​en una moneda es sólo la materialización de la inflación monetaria.

Si los índices bursátiles están subiendo tanto sin un crecimiento real de las ganancias, se debe a la inflación monetaria.

Una libertad que no utilizamos corre el riesgo de ser confiscada

En países como Estados Unidos, Japón, Italia y Francia cuyas finanzas públicas están en serios problemas, se espera que la crisis monetaria se intensifique.

Sobre todo porque el aumento de los precios está impulsado por los sueños de los grandes planificadores:

  • Luchar contra el “cambio climático” que exige el desarrollo de energías intermitentes, no rentables y fuertemente subvencionadas
  • Retorno a las barreras aduaneras y a las deslocalizaciones industriales forzadas
  • Las manipulaciones de los tipos de interés y del mercado de alquiler encarecen los inmuebles

De ahí el uso de la moneda por excelencia: el oro. Oro físico, por supuesto, no olvidemos que los bancos centrales almacenan oro físico en sus bóvedas. No almacenan certificados en memorias de computadora.

Pronto, la supuesta lucha de los banqueros centrales contra el aumento de los precios (erróneamente llamada “inflación”) por parte de los mismos banqueros centrales que emiten dinero sin compensación será vista como lo que es: una estafa.

Una vez que se desenmascare este engaño, ¿los banqueros centrales dejarán a los individuos libres para adquirir también la moneda definitiva? ¿Dónde tomarán medidas para prohibir a las personas comerciar con oro?

Como explico en mi libro sobre el dinero, las autoridades políticas y monetarias siempre han querido cortar el vínculo entre las monedas que controlan y el oro que no pueden controlar.

Al igual que ocurre con el efectivo, la libertad sólo puede existir si lo utilizamos. Todavía tenemos derecho a comprar y vender oro: ¡aprovechémoslo! Compre monedas de curso legal para atrapar a las autoridades monetarias en su propio juego (detallo el motivo en mi libro).

También existe una diferencia importante entre el oro y el efectivo. El oro es apátrida. Será difícil controlar sus operaciones en todo el mundo al mismo tiempo. Imaginemos un organismo internacional que decreta que el comercio de oro está prohibido en todo el mundo para los particulares. Esta sería la admisión misma del fraude que constituyen todas las monedas fiduciarias.

La crisis monetaria se acerca, porque nunca hemos visto a una generación aceptar pagar las deudas acumuladas por la anterior. Sin embargo, hoy en día todas las monedas son deuda, a excepción del oro. Esta deuda fue acumulada en particular por la generación de baby boomers. En Francia se siente actualmente una acritud palpable hacia los jubilados acusados ​​por los más jóvenes de ser rentistas. Estos jóvenes trabajadores no quieren pagar más impuestos para pagar los intereses de esta deuda que creen que no les concierne.

Independientemente de su edad, por una vez, lo que es bueno para los banqueros centrales –el oro en bóvedas– también lo es para usted (oro en forma física y comercializable almacenado en un lugar seguro, que usted controla).

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