En Jhansi, al norte de la India, se produjo un incendio en un hospital universitario. Al menos diez recién nacidos murieron.
Al menos diez recién nacidos murieron en un incendio, atribuido a un fallo eléctrico, en la unidad neonatal de un hospital de Jhansi, en el norte de India, anunciaron el sábado las autoridades locales.
El incendio se produjo hacia las 22H30 (17H00 GMT) del viernes en el hospital universitario Maharani Lakshmibai de Jhansi, en el estado de Uttar Pradesh, a unos 450 kilómetros al sur de la capital, Nueva Delhi.
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Imágenes de vídeo difundidas por televisiones mostraban camas y paredes carbonizadas dentro de la sala, y multitudes de familias angustiadas esperando fuera de las instalaciones. El personal de enfermería colocó vías intravenosas a los bebés rescatados, todos de sólo unos días de edad, que yacían uno al lado del otro en otra cama de hospital.
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“Desafortunadamente, diez niños han muerto”, dijo el número dos del estado, Brajesh Pathak, a los periodistas que lo interrogaron sobre el incendio. Hasta el momento se han identificado siete cadáveres de los diez, añadió.
Según el periódico indio Times Now, otros 16 recién nacidos se encuentran en estado crítico. NDTV informó que 54 niños se encontraban en la unidad de cuidados intensivos neonatales cuando se produjo el incendio.
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Según Pathak, en febrero se llevó a cabo una auditoría de seguridad del hospital, seguida de un simulacro de incendio tres meses después.
“Se investigará la causa del incendio”, añadió. “Si se detecta alguna infracción, se tomarán medidas estrictas contra los responsables y nadie se salvará”.
Un cortocircuito involucrado
Según el funcionario del distrito Avinash Kumar, el incendio fue causado por un cortocircuito eléctrico en la unidad. Los medios locales citaron a otros funcionarios diciendo que el incendio comenzó en una máquina utilizada para enriquecer el nivel de oxígeno atmosférico de la unidad. La alta concentración de gas combustible permitió que el fuego se propagara rápida y repentinamente, dijeron.
Estas muertes son “desgarradoras”, dijo el primer ministro indio, Narendra Modi, en X. “Mi más sentido pésame a quienes perdieron a sus hijos inocentes en este asunto. Pido a Dios que les dé la fuerza para soportar esta inmensa pérdida”, añadió.
El primer ministro de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, anunció que las familias afectadas recibirán una indemnización de 500.000 rupias (5.620 euros) y que todos los funcionarios del distrito “recibieron la orden de estar en pie de guerra para llevar a cabo operaciones de socorro y rescate”.
“Rezo al Señor Shri Ram para que traiga la salvación a las almas de los difuntos y una pronta recuperación a los heridos”, escribió en X, refiriéndose a Ram, uno de los dioses hindúes más importantes, también llamado Rama.
Los incendios son comunes en la India debido a las malas prácticas de construcción, el hacinamiento y el incumplimiento de las normas de seguridad. A finales de mayo, seis bebés murieron en un incendio que arrasó un hospital infantil en Nueva Delhi.
