Quienes se oponen al acuerdo inmobiliario dicen que elevaría los precios de los apartamentos y fortalecería el dominio de Moscú en la región.
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Manifestantes opuestos a una medida que habría permitido a los rusos comprar bienes raíces en el territorio georgiano de Abjasia irrumpieron el viernes en el edificio del Parlamento y de la administración presidencial de esta región separatista.
Al menos ocho personas resultaron heridas en el tumulto que tuvo lugar en la capital regional de Sujumi, en el Mar Negro, informaron los medios.
El Parlamento tenía previsto discutir la ratificación de la medida, pero pospuso la sesión cuando los manifestantes se reunieron frente a las puertas del complejo gubernamental. Derribaron una puerta con un camión y entraron corriendo al recinto, arrojando piedras a la policía, que respondió con gases lacrimógenos.
« ¡Abajo el presidente!“, lanzó uno de los manifestantes. “Pero además de nuestra exigencia de dimisión del presidente, pedimos que el Parlamento imponga una moratoria sobre el acuerdo (con rusia) y sobre la ley de apartamentos (Controvertida ley sobre la construcción de hasta 10.000 apartamentos de apartahotel en el este de Abjasia). Si nuestro pueblo no consigue dos moratorias hoy y el presidente no dimite, creo que no deberíais abandonar este lugar. ».
La oficina del presidente Aslan Bjania anunció más tarde que estaba preparando un decreto para retirar la medida de su consideración. Luego, la policía abandonó el edificio del Parlamento, pero los manifestantes permanecieron allí, exigiendo la dimisión del señor Bjania. Los manifestantes también irrumpieron en el edificio de la administración presidencial y prometieron permanecer allí hasta que Bjania dimita y se convoquen elecciones anticipadas.
La mayor parte de Abjasia se separó de Georgia durante el conflicto armado que terminó en 1993, y Georgia perdió el control del resto del territorio durante la corta guerra con Rusia en 2008. Rusia reconoce a Abjasia como un país independiente, pero muchos abjasios temen que esta región de unos 245.000 habitantes es sóloun estado cliente de Moscú.
Quienes se oponen a este acuerdo inmobiliario creen que haría subir los precios inmobiliarios y fortalecería el dominio de Moscú en la región. Las montañas de Abjasia y las playas del Mar Negro lo convierten un destino popular para los turistas rusos y la demanda de casas de vacaciones podría ser fuerte.
El arresto de cinco figuras de la oposición durante una manifestación similar el lunes desató protestas generalizadas al día siguiente, durante las cuales se bloquearon los puentes que conducen a Sujumi.
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