El proceso penal contra Noémie Beauchemin llegó a su fin el viernes en el juzgado de Val-d’Or, cuando la mujer, originaria de La Corne, se declaró culpable de una serie de cargos, incluido el de incitar a alguien a matar a su ex cónyuge. Pasará dos años tras las rejas.
Las acciones tomadas por la mujer de 29 años, en 2019 y 2020, son parte de un conflicto con su víctima, a quien intentaba dañar para sacarlo de la vida de su hijo.
En particular, Noémie Beauchemin intentó atrapar a su expareja colocando objetos en su coche, a través de un tercero, para acusarlo de tráfico de drogas y de producción de pornografía infantil.
Se admitió culpable de haber presentado, en tres ocasiones, denuncias ante la Sûreté du Québec (SQ) contra el hombre por historias falsas de agresión sexual, agresión y allanamiento de morada.
En agosto de 2020, Noémie Beauchemin se comunicó mediante mensajes de texto con una mujer para preguntarle si conocía a alguien que pudiera herir o eliminar a su excónyuge. Ofrece hasta 10.000 dólares si una agresión causa lesiones permanentes, o hasta 35.000 dólares por asesinato.
Luego, la mujer le dice que no conoce a nadie que pueda ejecutar ese contrato.
Noémie Beauchemin, sin embargo, la relanzó tres semanas después con un nuevo plan: pedirle que hiciera una declaración falsa a la policía contra el ex cónyuge, para acusarlo de posesión de drogas y pornografía juvenil.
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El juzgado de Val-d’Or. (Foto de archivo)
Foto: Radio-Canadá / Mélanie Picard
La acusada también se declaró culpable de un cargo de acoso criminal contra su excónyuge, pero se solicitó la suspensión del proceso por todos los cargos que enfrentaba relacionados con pornografía infantil y tráfico de drogas.
Dos años de prisión
El juez Christian Leblanc, del Tribunal de Quebec, respaldó la propuesta de los dos fiscales del caso, quienes sugirieron una pena de dos años de prisión en una penitenciaría federal.
Noémie Beauchemin también estará sujeta a un período de prueba de tres años cuando salga de prisión, durante el cual deberá realizar 150 horas de servicio comunitario.
Al pronunciar su veredicto, el juez Leblanc destacó la gravedad de las acciones emprendidas por el acusado y las importantes consecuencias que aún hoy sufren la víctima y sus seres queridos.
Entre los atenuantes del caso, el juez reconoció que las declaraciones de culpabilidad favorecieron a la imputada, además de su falta de antecedentes penales, su sincero arrepentimiento y los importantes avances constatados en un informe de seguimiento psicológico.