Un hombre armado con explosivos murió el miércoles por la noche en Brasilia después de un intento fallido de ingresar al edificio del Tribunal Supremo de Brasil, un “ataque” fallido según las autoridades, que se produce pocos días antes de una cumbre del G20.
Este supuesto intento de ataque contra una importante institución de la democracia brasileña revive el recuerdo de los disturbios de extrema derecha contra las instituciones brasileñas, en particular el ejecutivo, el legislativo y el judicial, en enero de 2023 en la misma plaza de la capital.
Un ataque que no es casualidad
El incidente se produce en un contexto especialmente tenso: el presidente de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva acoge una cumbre del G20, mientras está prevista una visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Brasilia.
Coche en llamas y explosión
La policía federal ha abierto una investigación sobre estos “ataques”. En el lugar, los investigadores se movían con cautela, ya que el cuerpo del hombre estaba rodeado de explosivos equipados con un temporizador. Las dos detonaciones, que se produjeron alrededor de las 19.30 horas (22.30 horas GMT), no causaron heridos.
Los policías, durante un patrullaje, detectaron el vehículo en llamas y vieron al individuo salir corriendo, según informó el sargento Santos, de la Policía Militar del Distrito Federal. “El vehículo contenía varios explosivos conectados por ladrillos, pero no todo se incendió por completo”, dijo.
El Tribunal Supremo dijo que se escucharon “dos fuertes explosiones” al final de una sesión y que, como medida de precaución, los jueces y el personal fueron evacuados. El palacio presidencial estaba cerrado y era inaccesible, mientras que toda la plaza estaba acordonada bajo la lluvia torrencial por fuertes medidas de seguridad.
Una funcionaria del Tribunal de Cuentas de la Unión, Laiana Costa, dijo a los medios locales que había visto a un “hombre pasar por allí”. “De repente escuché un ruido y cuando miré hacia atrás, había fuego y humo”, dijo.
Legado de los disturbios
El 8 de enero de 2023, una semana después del regreso de Lula al poder, miles de partidarios de Jair Bolsonaro, derrotado en las elecciones de 2022, irrumpieron en las instituciones situadas en la plaza de los Trois-Pouvoirs. Estos ataques dejaron una huella significativa y llevaron a un fortalecimiento de las medidas de seguridad en los edificios de los tres poderes, recordó Rodrigo Pacheco, presidente del Senado.
Entre otras investigaciones delicadas, Alexandre de Moraes, un influyente juez del Tribunal Supremo, lidera la investigación sobre este supuesto intento de “golpe de Estado”, que recuerda el asalto al Capitolio por parte de partidarios de Donald Trump el 6 de enero de 2021 en el Estados Unidos.
Tras la supuesta identificación del agresor, Fabio Wajngarten, asesor de Bolsonaro, declaró en X: “Hay fanáticos en todas las corrientes políticas. Hacer generalizaciones es villanía y persecución”.
Lula será el anfitrión de una cumbre del G20 en Río de Janeiro el lunes y martes que reunirá a los principales líderes mundiales. El miércoles recibirá al presidente chino en Brasilia para una visita de Estado.