Cerca de 3.000 manifestantes acudieron para expresar su enfado por la celebración de la gala de apoyo a Israel este miércoles 13 de noviembre en París. En boca de todos: el nombre de Bezalel Smotrich, el ultranacionalista ministro de Finanzas israelí que se esperaba allí.
En el camino recorrido por la procesión para unir la estación Saint Lazare, lugar de encuentro, y la plaza de la República de París, una sola frase está en boca de todos este miércoles 13 de noviembre: “Es una pena”.
La organización por parte de la asociación judía radical francesa “Israel es para siempre” de una gala presentada por sus organizadores como la “movilización de las fuerzas sionistas francófonas al servicio del poder y de la historia de Israel” En París, en vísperas del partido de fútbol anunciado bajo alta tensión entre Francia y el Estado hebreo en el Stade de France, eso no sucede. “A unos cientos de metros de aquí [le lieu est tenu secret, NDLR] En Gaza se celebra una gala de disculpa por el genocidio”afirma Fatiha. Con el pelo gris recogido hacia atrás, las manos metidas en los bolsillos de su abrigo y una keffiyeh blanca y negra –símbolo del nacionalismo palestino– sobre sus hombros, la manifestante es formal: “Acoger es respaldar”.
“Vienen a cobrar…
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