El martes 12 de noviembre, en Beaune (Côte-d’Or), se subastaron 600 antiguos carteles de denominaciones de vino de Borgoña, informa “France 3”. La venta superó todas las expectativas y recaudó 56.000 euros, suficiente para financiar una biblioteca y un centro de documentación en la Cité des Climats et vins de Bourgogne.
Fue una subasta cuanto menos original que tuvo lugar en Beaune (Côte-d’Or), en la Cité des Climats et vins de Bourgogne, el martes 12 de noviembre. Casi 50 compradores in situ y varios centenares online adquirieron 600 paneles de denominaciones de vino de Borgoña, según informa Francia 3 Borgoña-Franco Condado.
Entre estas señales, antiguamente instaladas en la ruta del vino para los automovilistas, 29 de ellas llevan el nombre de grandes vinos. Si estas señales de hace treinta años se han puesto a la venta es porque han sido sustituidas por versiones más modernas en las carreteras de Borgoña.
Tener en casa “el símbolo de un gran vino”
Los precios iniciales oscilaron entre 30 y 500 euros, dependiendo de la rareza y el estado de los paneles. Durante la venta, algunos superaron la barrera de los 3.000 euros, como el Grands-Echezeaux Grand Cru, vendido por 3.500 euros. En total, gracias a esta venta se recaudaron casi 56.000 €. Los beneficios se donarán a la Cité des Climats et vins de Bourgogne para financiar una biblioteca y un centro de documentación.
El subastador Jérôme Duvillard, responsable de la venta, se mostró encantado con el éxito del evento. Explica la locura por los carteles de denominación de vino por el deseo de tener en casa “el símbolo de un gran vino oficial”, aunque la placa en cuestión “a veces haya recibido un golpe del tractor”.
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