La Agencia Nacional de Meteorología (Aemet) ha emitido alerta roja para las provincias de Málaga y Tarragona por esta nueva “gota fría”.
Miles de personas evacuadas preventivamente, líneas de tren suspendidas, calles sumergidas: nuevas lluvias torrenciales cayeron el miércoles en el sur y el este de España, dos semanas después de las mortíferas inundaciones que azotaron la región de Valencia. La Agencia Nacional de Meteorología (Aemet) ha emitido alerta roja, nivel máximo, para las provincias de Málaga (Andalucía, Sur) y Tarragona (Cataluña, Noreste), debido a esta noticia. “gota fría”una depresión aislada de gran altitud bastante común en otoño en la costa mediterránea española.
“Hoy Málaga está paralizada”declaró el presidente de la región de Andalucía, Juan Manuel Moreno, durante un viaje a Sevilla. “Más vale prevenir que curar, lo vimos en Valencia”siendo la prioridad “minimizar el impacto en términos de pérdida de vidas humanas”insistió el presidente de la región, dos semanas después de la catástrofe que dejó al menos 223 muertos en la Comunidad Valenciana.
En Málaga, donde se inundaron varias vías, se cerró el metro, se suspendió la línea de tren a Madrid y se desviaron vuelos. El municipio evacuó a casi tres mil personas “preventivamente”. “Todo va bien desde que nos avisaron anoche”dijo a la AFP Ida María Ledesma Martín, vecina de Campanillas, cerca de Málaga: “Esta mañana, sobre las 10 de la mañana, agentes policiales recorrieron las calles para avisar a todo el mundo, el despliegue es muy bueno y creo que no es nada exagerado”.
Barricadas improvisadas
En las zonas en alerta roja, situadas en la costa, podrían acumularse en las próximas horas entre 120 y 180 litros de precipitación por metro cuadrado (120 a 180 milímetros), según la Aemet. Las precipitaciones durarán hasta el jueves. También se esperan fuertes lluvias, aunque menos intensas, por la noche en la región de Valencia, afectada por las mortíferas inundaciones del 29 de octubre, con el temor particular de ver las alcantarillas aún obstruidas por el desbordamiento de lodo.
En el municipio de Paiporta, considerado el epicentro del desastre hace dos semanas, los vecinos levantaron barricadas improvisadas con bolsas de tierra frente a las puertas de las casas. Estas nuevas lluvias han afectado las operaciones de búsqueda de las 17 personas aún desaparecidas, concentradas principalmente en los alrededores de los cursos de agua y en la costa, en las desembocaduras de los ríos. “La búsqueda en el mar se vio comprometida debido al temporal marítimo”explicó a la prensa Rosa Tourís, portavoz de Cecopi, el comité de emergencia de Valencia. “Tras este episodio meteorológico se volverán a evaluar las mareas para determinar las zonas de búsqueda”añadió.
Como medida de precaución, varios municipios de la región han pedido a los miles de voluntarios que acuden cada día para ayudar a los vecinos a despejar las calles que no acudan el miércoles a las zonas siniestradas. En Andalucía y Cataluña, donde se encuentran las provincias en alerta roja (Málaga y Tarragona), las autoridades por su parte anticiparon las posibles consecuencias de las fuertes lluvias enviando mensajes de alerta a los teléfonos móviles, cuya recepción provoca un fuerte pitido.
Aplazamiento de la Copa Billie Jean King de tenis femenino
Las autoridades de Valencia fueron fuertemente criticadas por enviar este mensaje de advertencia a última hora del 29 de octubre. La indignación contra las autoridades, acusadas de haber evaluado mal los riesgos y de haber retrasado demasiado el despliegue de la ayuda, dio lugar el sábado a manifestaciones multitudinarias, la mayor de las cuales reunió a 130.000 personas en la ciudad de Valencia. La alerta roja emitida por la Aemet, correspondiente a fenómenos meteorológicos “excepcionalmente intenso” presentación “un nivel de riesgo muy alto para la población”también llevó a las autoridades a suspender las clases el miércoles en parte de Cataluña y en ciudades andaluzas como Granada y Málaga.
En esta ciudad, el mal tiempo también provocó el aplazamiento para el viernes de un partido entre España y Polonia en el marco de la Copa Billie Jean King de tenis femenino, que debía disputarse el miércoles por la tarde. En la Comunidad Valenciana, esta nueva gota de frío provocó olas de más de cuatro metros en la costa, y convenció a las autoridades a cerrar determinadas carreteras y líneas de tren. También se suspendió el tráfico marítimo en los puertos de Valencia y Sagunto.