Un joven soldado se encuentra entre la vida y la muerte tras ser atacado a la salida de una discoteca de Besançon (Doubs) por haber insinuado a una joven, anunció el martes el fiscal, precisando que dos sospechosos están encarcelados.
Este soldado de 26 años del 19º Regimiento de Ingenieros de Besançon, originario de Guadalupe, está hospitalizado “en estado de muerte cerebral”, afirmó el fiscal de Besançon, Étienne Manteaux, durante una rueda de prensa. “Su muerte aún no ha sido pronunciada pero su esperanza de vida está casi reducida a cero, debido a la gravedad de su daño cerebral”, añadió.
El viernes, alrededor de las 3:50 a. m., el hombre fue encontrado inconsciente en el estacionamiento de la discoteca QG. Durante su hospitalización, los médicos notaron un daño cerebral grave.
Las imágenes de videovigilancia de la discoteca permitieron a la policía constatar que se había producido una pelea entre el joven y tres individuos.
Golpeado cuando estaba de pie, cayó y su cráneo golpeó violentamente el suelo, luego sus agresores le propinaron varias patadas, especialmente en la cabeza. La investigación confiada al servicio de policía judicial local (SLPJ) permitió identificar a tres sospechosos. Uno de ellos está prófugo y otros dos, de 19 años, han sido detenidos.
Un “ataque particularmente violento e injusto”
Explicaron que este joven soldado había “probado un método de seducción” con una joven, la novia del fugitivo, pidiéndole dos veces su número de móvil, “lo que disgustó a la amiguita”, según Étienne Manteaux.
Ambos sospechosos admitieron haber golpeado a la víctima. Fueron acusados de “violencia voluntaria en una reunión con resultado de incapacidad permanente” y encarcelados. Esta calificación cambiará en caso de fallecimiento de la víctima. Uno de ellos ya ha sido condenado seis veces, dos de ellas por violencia agravada.
El director interregional de la policía nacional (DIPN) de Doubs, Laurent Perraut, denunció un “ataque especialmente violento e injusto” y prometió “destinar muchos recursos a encontrar al tercer fugitivo”.
El prefecto de Doubs, Rémi Bastille, decidió “cerrar administrativamente esta discoteca por un período de 30 días”, tras “los numerosos actos de violencia cometidos fuera del establecimiento” en los últimos meses, así como “múltiples denuncias”. de los residentes locales por molestias”.