El ex ministro David Lévy ha fallecido hoy (domingo) a la edad de 86 años.
David Lévy fue más que un ex ministro, fue un símbolo para los judíos que llegaron a Israel desde el norte de África y una figura central en el desarrollo y las ciudades periféricas para las que trabajó toda su vida.
Nacido en Rabat, Marruecos, hizo aliá a los 19 años. En 1969, fue elegido el miembro más joven de la Knesset por el partido Gahal.
Después de las elecciones de 1977, que llevaron al poder al poder por primera vez en la historia del estado, el Primer Ministro Menachem Begin lo nombró Ministro de Integración y luego Ministro de Vivienda. Entre 1979 y 1990 fue Viceprimer Ministro y Ministro de Vivienda y en 1990 fue nombrado Ministro de Asuntos Exteriores durante el gobierno de Itshak Shamir.
En 2003, el entonces miembro del Likud, David Lévy, se opuso a la retirada unilateral de la Franja de Gaza. En 2006 anunció su salida de la vida política, tras una intensa y larga carrera de 36 años.
El Primer Ministro Netanyahu le rindió homenaje esta tarde: “Lamento con todos los ciudadanos de Israel el fallecimiento de David Levy, que sirvió fielmente al público durante décadas, ministro de los gobiernos israelíes y viceprimer ministro. David, nacido en Marruecos, trazó su camino en la vida con sus diez dedos. A nivel local, contribuyó al desarrollo de la ciudad de Beit Shean, que se convirtió en un símbolo del crecimiento de las ciudades de desarrollo suburbano. A nivel nacional, dejó una huella personal en la vida política, al mismo tiempo que se ocupaba de las poblaciones desfavorecidas. Como Ministro de Asuntos Exteriores y Viceprimer Ministro, David ayudó a establecer relaciones diplomáticas con países que habían evitado hacerlo durante los años de la Guerra Fría. Sus visitas a las capitales del mundo se caracterizaron por grandes elogios a su lealtad al Estado de Israel. Colaboré con David en los gobiernos del Likud, e incluso con sus hijos que participaron con éxito en la política nacional. No siempre estuvimos de acuerdo en todo, pero siempre aprecié su sentido de misión. Mi esposa Sara y yo enviamos nuestras condolencias a la familia Levy, que sepan que el recuerdo de nuestro querido David seguirá existiendo en nuestros corazones durante años y generaciones”.
El presidente Herzog destacó el particular y admirable recorrido de David Lévy: “La historia de vida de David Lévy, el joven que fue desde Marruecos directamente a los ma’abarot (campamentos) y desde allí trazó su camino hacia los más altos cargos de dirección del Estado, Es un ejemplo admirable de liderazgo social sincero, que refleja la bella cara de lo que es Israel. Hoy nos separamos, con gran dificultad, de un luchador social con toda su alma, cuya riqueza y particularidad de lenguaje ha sido la voz de las ciudades en desarrollo y periféricas durante décadas, la Knesset, dentro de la Histadrut y el gobierno. David Lévy, ganador del Premio Israel por su significativa contribución a la sociedad y al Estado, quedará en los anales de Israel como un símbolo del Estado y de la acción social revolucionaria que dejará una huella auténtica en la sociedad y el Estado. Tuve el mérito de trabajar con él y aprender de su inteligencia y experiencia. Envío mi más sentido pésame a su familia y a todas las personas que lo quisieron. Que su memoria sea bendita”.
