¡Muy fuerte tensión entre Francia e Israel! La policía israelí allanó una finca francesa en Jerusalén y arrestó a dos gendarmes antes de liberarlos. París denuncia una situación inaceptable y convoca al embajador israelí. Las explicaciones de Israel se consideran falsas. Una gran crisis diplomática que no quedará sin respuesta según fuentes francesas…
Fue un incidente diplomático de rara gravedad ocurrido en Jerusalén, que provocó una gran tensión entre Francia e Israel. Según fuentes cercanas al asunto, agentes de policía israelíes irrumpieron inesperada y violentamente en una zona perteneciente a Francia, a pesar de las repetidas advertencias de las autoridades francesas. Luego arrestaron a dos gendarmes franceses presentes en el lugar antes de finalmente liberarlos. Un acto considerado totalmente inaceptable por París.
Se burla la integridad de los dominios franceses en Jerusalén
El incidente tuvo lugar durante una visita del ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, al lugar de Eleona, una zona de peregrinación que forma parte de las propiedades francesas en Tierra Santa. Ante la intrusión armada de las fuerzas de seguridad israelíes, el ministro denunció una “situación inaceptable” y se negó a entrar en el lugar.
“No voy a entrar hoy, porque las fuerzas de seguridad israelíes entraron allí de manera armada, sin obtener primero la autorización de Francia y sin aceptar salir”
declaró Jean-Noël Barrot a la prensa.
La Eleona, construida sobre la cueva donde se dice que Cristo enseñó el “Padre Nuestro”, es una de las cuatro propiedades nacionales francesas en Jerusalén y sus alrededores, testigos de la presencia histórica de Francia en la ciudad santa. El ministro francés insistió en que “debe respetarse absolutamente la integridad de estas zonas de las que Francia es responsable”.
Gendarmes arrestados a sabiendas
Pero lo más impactante sigue siendo la detención de dos gendarmes franceses de servicio en este lugar diplomático. Según fuentes consultadas por Le Figaro, las fuerzas israelíes sabían perfectamente que estaban deteniendo a representantes de las fuerzas de seguridad francesas, que se benefician de un estatuto especial.
De hecho, tras la irrupción de la policía israelí en la finca de Eleona, los gendarmes presentes hablaron durante casi 30 minutos con las fuerzas de seguridad, haciendo imposible cualquier malentendido sobre su identidad y su estatus. “Fue después de la partida de la delegación francesa que las fuerzas israelíes decidieron arrestar a los gendarmes, con pleno conocimiento de su situación”, afirmó una fuente diplomática francesa.
Se había advertido a Israel que no se toleraría ninguna fuerza de seguridad israelí.
Otro elemento condenatorio para Israel en este asunto: las autoridades francesas afirman haber advertido en múltiples ocasiones que no se autorizaría la presencia de las fuerzas de seguridad israelíes durante la visita ministerial. Una posición firme justificada por el estatus especial de los dominios franceses en Jerusalén.
“Antes de la visita se había mencionado en numerosas ocasiones que no se permitiría la presencia de elementos de seguridad israelíes en el lugar. Los cuatro dominios nacionales de Francia en Jerusalén son propiedad del gobierno francés, que es responsable de garantizar su integridad y responsabilidad.
Insisten estas mismas fuentes diplomáticas.
“Falsas” explicaciones israelíes según Francia
Israel intentó dar explicaciones, pero éstas fueron descartadas de plano por la parte francesa. Según un comunicado de prensa de la policía israelí, “dos individuos inicialmente no identificados” supuestamente “negaron la entrada al lugar a los agentes israelíes responsables de la seguridad del ministro”. Una versión totalmente desmentida por París.
“Las acusaciones israelíes son falsas. Este incidente no se detendrá ahí, sobre todo porque se ve agravado por estas declaraciones falaces difundidas por las autoridades israelíes”.
amenazar las fuentes diplomáticas francesas.
Convocado el embajador israelí: ¿hacia una gran crisis diplomática?
Ante lo que considera una clara violación de su soberanía, Francia reaccionó inmediatamente convocando al embajador de Israel en París. Por tanto, la crisis está tomando un importante giro diplomático entre ambos países.
Para observadores informados, el incidente de Eleona es sólo un síntoma de una relación cada vez más tensa en los últimos meses entre Francia e Israel, a pesar de los vínculos históricamente fuertes entre los dos países. La gestión de la seguridad de Israel en los lugares sagrados de Jerusalén, particularmente durante las festividades religiosas, ha provocado fuertes críticas de los países occidentales, incluida Francia.
En términos más generales, la política de asentamientos israelí en los territorios ocupados y el bloqueo del proceso de paz con los palestinos son áreas persistentes de fricción. Si bien las relaciones entre París y Tel Aviv no están en buena forma, recientemente parecían estar bajo control. Hasta este episodio que sin duda marca un punto de inflexión.
¿Hasta dónde llegará Francia para mostrar su descontento y obtener una disculpa de Israel? ¿Deberíamos esperar medidas de represalia por parte de París? ¿El incidente de Jerusalén reorganizará las cartas diplomáticas en Medio Oriente? Muchas preguntas quedan sin respuesta tras este extraordinario episodio que marcará un hito en las relaciones franco-israelíes. Una cosa es segura: París no pretende quedarse ahí.