Los precios del petróleo terminaron subiendo el jueves gracias a un repunte técnico tras la caída de la víspera, mientras los operadores aún se preguntan sobre las consecuencias de una nueva presidencia de Trump. El precio del barril de Brent del Mar del Norte para entrega en enero ganó un 0,95%, para cerrar en 75,63 dólares. El barril de American West Texas Intermediate (WTI) con vencimiento en diciembre ganó un 0,93%, hasta 72,36 dólares. “El mercado está recuperando el sentido” después de un estancamiento el miércoles, explicó Stephen Schork, del Grupo Schork. “El dólar estaba tan fuerte (el miércoles) que pesó sobre los precios”.
El miércoles, los operadores reaccionaron ante la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses, considerada positiva para el dólar. Esperado aumento del déficit y de la deuda, reactivación de la inflación y aceleración del crecimiento, los inversores asociaron todos estos acontecimientos favorables al dólar a un nuevo mandato del promotor inmobiliario. Como la gran mayoría de los contratos de oro negro están denominados en esta moneda, su apreciación tiende a ejercer presión sobre los precios. Para Stephen Schork, las características técnicas del mercado abogan por una subida de precios, “Pero un rebote técnico no puede convertirse en una dinámica fundamental”. O, “los fundamentos son muy malos” para los precios actuales, con una oferta abundante y una demanda china poco fuerte, recuerda el analista.
Embargo a las entregas iraníes
Si los oradores vieron el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca como positivo para la industria del petróleo y el gas, les costó imaginar un impacto a corto plazo en los precios del crudo. Donald Trump, autoproclamado aliado de la industria petrolera, prometió crear las condiciones para su crecimiento en Estados Unidos, principalmente reduciendo la regulación. “Pero las empresas son privadas y su lealtad es con los accionistas, a quienes quieren asegurar el mejor retorno de la inversión”advierte Stephen Schork, lo que les llevó a limitar voluntariamente su producción para evitar una caída de los precios.
Al mismo tiempo, con el regreso de Donald Trump, “el embargo a los suministros de petróleo” iraní “se aplicará con mayor firmeza”considera también el analista, lo que podría privar al mercado de parte de los barriles de la República Islámica y sostener los precios. “Aún es un poco pronto para decir cómo evolucionarán los precios” bajo la posible influencia del republicano, advierte Daniel Zachary, profesor de política energética en la Universidad Johns Hopkins.