El Senado examinó ayer, en comisión, el proyecto de ley destinado a prohibir las corridas de toros y las peleas de gallos en presencia de menores de 16 años. Esta última fue presentada el 27 de marzo por los senadores Samantha Cazebonne (Renacimiento) y Arnaud Bazin (LR). La lucha contra las corridas de toros y los espectáculos asociados se libra desde hace más de veinte años, pero en vano.
Tan recientemente como 2022, el diputado del LFI Aymeric Caron (ahora relacionado con el Nuevo Frente Popular) pasó al frente y presentó un proyecto de ley destinado a abolir las corridas de toros. Finalmente retiró su texto.
Tras un primer examen, este miércoles el Senado dio su primera luz roja, indica la AFP, según diversas fuentes parlamentarias. Para justificar el rechazo, el ponente de Horizons, Louis Vogel, destacó en particular las “sanciones penales desproporcionadas” contenidas en el texto, que podrían llegar hasta cinco años de prisión y una multa de 75.000 euros.
“La intervención del legislador en las tradiciones locales reconocidas como legítimas no puede hacerse sin consultar a las comunidades, que ya regulan los espectáculos y el funcionamiento de las escuelas taurinas”, afirmó a la AFP el senador.
“Éste no es un debate a favor o en contra de las corridas de toros, sino una discusión jurídica”, pero “en el círculo familiar sólo deberíamos intervenir con mano temblorosa”, añadió.
Para defender este nuevo proyecto de ley, los senadores subrayan las consecuencias de estas representaciones sobre la psicología del niño.
“Un grupo de psiquiatras y psicólogos franceses advierten así contra el trauma que puede generar presenciar escenas violentas ante el aplauso de adultos de confianza, a quienes les resultará difícil admitir la tristeza o la ansiedad provocada (…)”, afirmó Samantha Cazebonne. en un comunicado de prensa publicado el pasado mes de octubre.
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