Las operaciones de búsqueda de desaparecidos, seis días después de las inundaciones que dejaron 217 muertos, se centraron el lunes en los aparcamientos subterráneos de la Comunidad Valenciana.
“Hemos previsto una morgue con capacidad para 400 muertos hoy”, explicó el general Javier Marcos, jefe de la Unidad Militar de Emergencias (UME), durante una rueda de prensa. “Al principio había una morgue para unas 100 víctimas, pero rápidamente nos dimos cuenta de que esto no sería suficiente”, subrayó.
El lunes por la mañana, la Agencia Meteorológica Española (Aemet) aseguró oficialmente que la situación de “crisis meteorológica” había terminado en la Comunidad Valenciana, pero la preocupación se trasladó a mitad del día unos 350 kilómetros más al norte, en Barcelona, situada en alerta roja.
Las lluvias torrenciales provocaron la cancelación de 153 vuelos, dijo el ministro de Transporte, Oscar Puente. Otros dieciocho vuelos también tuvieron que ser desviados. El tráfico de trenes de alta velocidad entre Barcelona y Madrid también se vio afectado.
Impresionantes imágenes, ampliamente difundidas en las redes sociales, mostraban también vehículos bloqueados en una autopista cercana a la capital catalana o calles inundadas en localidades vecinas. La alerta roja finalizó a las 14:00 horas.
Hola a todos. Mientras unas inundaciones particularmente violentas enlutan a España, la redacción de 20 minutos se moviliza para brindarle toda la información sobre las investigaciones actuales. Los resultados son sólo provisionales y ya son particularmente trágicos. Esta devastadora catástrofe natural dejó al menos 217 muertos: 213 sólo en la Comunidad Valenciana, tres en Castilla-La Mancha y uno en Andalucía.
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