La situación podría volver a empeorar. Al menos 158 personas han muerto en las apocalípticas inundaciones que azotaron el sureste de España esta semana. Si la situación se ha calmado en la Comunidad Valenciana, la más afectada por las precipitaciones, ha empeorado en la costa onubense.
La Agencia Meteorológica Nacional (Aemet) emitió la “alerta roja” (nivel máximo de alerta sinónimo de riesgo extremo) la noche del jueves 31 de octubre al viernes 1 de noviembre, debido a las fuertes lluvias en la región de Huelva, Andévalo y Condado, al menos hasta las nueve de la mañana.
Continúa vigente la alerta naranja en varias zonas, en Mallorca y Menorca, en el litoral sur y prelitoral de Tarragona y en el interior norte, litoral norte y litoral sur de Castellón.
Varias decenas de desaparecidos
En total, sólo en la región de Valencia se produjeron 155 muertes, con diferencia las más afectadas por los torrentes de barro que devastaron el sureste del país el martes por la tarde y la noche del martes al miércoles. A lo que hay que sumar dos fallecidos en la vecina provincia de Castilla-La Mancha y uno en Andalucía.
El informe anterior, que databa del miércoles por la noche, indicaba 95 muertos, pero las autoridades no ocultaron que era de esperar lo peor, sin dar ninguna indicación sobre el número de personas desaparecidas.
Por primera vez, el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, hizo una estimación al respecto, afirmando durante una rueda de prensa en Madrid que el jueves por la tarde había “decenas y decenas” de personas desaparecidas.
Más de 1.200 soldados desplegados
De visita en Valencia, capital de la región del mismo nombre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que el episodio de mal tiempo “no ha terminado” y llamó a los habitantes de esta región a “quedarse en casa” y “no salir”.
Se refería a una “alerta roja” (nivel máximo de alerta sinónimo de riesgo extremo) lanzada el jueves por la mañana por la Agencia Nacional de Meteorología (Aemet) para determinadas zonas de la provincia de Castellón, situada justo al norte de la de Valencia, donde cayeron fuertes lluvias. . Sin embargo, la alerta se levantó por la tarde, pasando a naranja, lo que refleja una reducción del peligro.
Ángel Víctor Torres también anunció que el Gobierno central había acordado poner a disposición del Gobierno regional “todos los recursos del ejército” para abrir carreteras y llegar a “todos los rincones” de la zona afectada, lo que hace pensar que algunos pueblos siguen incomunicados. el mundo.
También indicó que 39 personas han sido detenidas y que “ante los saqueos y los crímenes”, las fuerzas de seguridad demostrarán “absoluta firmeza”. Más de 1.200 soldados ya están desplegados sobre el terreno, principalmente en la región de Valencia, junto con bomberos, policías y socorristas. Según las autoridades, miles de personas siguen sin electricidad en la región.