El 3 de enero de 2020, este repartidor de 42 años fue inmovilizado en el suelo con su casco de moto en la cabeza durante un control policial en París, provocándole molestias.
Publicado el 30/10/2024 11:39
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La fiscalía de París solicitó, el martes 29 de octubre, un juicio por homicidio involuntario contra tres agentes de policía, al final de la investigación sobre la muerte del repartidor Cédric Chouviat en la capital en 2020, según supo franceinfo por la fiscalía de París, confirmando una información de Mediapart. Corresponde ahora al juez de instrucción enviar o no a los agentes de policía a juicio.
Según el auto de procesamiento final consultado por franceinfo, la fiscalía subraya que los tres funcionarios cometieron “negligencia” y “Su acción combinada durante la detención resultó ser la causa directa del homicidio involuntario”. “Nos parece evidente que un juicio es necesario, pero no debe devaluarse por la elección de una calificación que es un disparate jurídico porque no refleja la realidad del carácter voluntario de la violencia sufrida”.reaccionaron los abogados de la familia de la víctima.
El 3 de enero de 2020, Cédric Chouviat, repartidor y Su padre, de 42 años, había sido inmovilizado en el suelo con su casco de motociclista en la cabeza durante un control policial, lo que le provocó malestar. Hospitalizado en estado crítico, fue declarado muerto el 5 de enero. Tres de los cuatro policías que participaron en el control fueron acusados en julio de 2020 de homicidio involuntario, mientras que un cuarto policía fue colocado bajo la condición intermedia de testigo asistido.
Varios informes médicos han puesto en duda las actuaciones de detención de los agentes de policía. Al mismo tiempo, la familia de Cédric Chouviat plantea la cuestión de la intencionalidad de la violencia por su parte, acusándola de no haber reaccionado con suficiente rapidez a los signos de asfixia de la víctima, que los repitió nueve veces. “Me estoy asfixiando” en trece segundos antes de sentirse mal. La policía cuestionó haber percibido la “signos evidentes” de la asfixia de Cédric Chouviat. “Si hubiésemos oído siquiera una vez” la expresión “Me estoy asfixiando”, “habríamos parado”había certificado en julio de 2020 al principal imputado ante el juez de instrucción.