Huawei presentó su nuevo teléfono inteligente, el Mate 70, este martes 26 de noviembre. Equipado por primera vez con un sistema operativo interno que compite con iOS y Android, el modelo estrella de la firma china intentará revolucionar el mercado.
La revolución está en marcha en el Reino Medio. Pero esta vez no hay un pequeño libro rojo en la cabecera de la góndola, sino un teléfono inteligente “superpoderoso”. Y con razón, la empresa china Huawei presentó este martes 26 de noviembre su primer teléfono móvil equipado con un sistema operativo íntegramente desarrollado por ella. Una revolución marcada por la voluntad de la empresa de resistir el dominio de los líderes del mercado, Apple y Google. Gigantes digitales cuyos sistemas iOS y Android son utilizados por la mayoría de dispositivos móviles.
Con su nuevo sistema, HarmonyOS Next, Huawei busca revertir la tendencia. Y la nueva serie de teléfonos “Mate 70”, equipada con el nuevo sistema operativo, será la punta de lanza de la empresa en su intento de desbancar a los campeones tecnológicos. Además, este lanzamiento marca un importante punto de inflexión para Huawei, antes paralizada por las sanciones estadounidenses, pero cuyas ventas se han recuperado desde hace dos años. “Hoy está aquí el esperado Mate 70, el más potente jamás visto”, anunció Richard Yu, presidente del sector de consumo del grupo, durante una conferencia desde su sede en Shenzhen (China).
Mucho en juego para Huawei
Hay mucho en juego, porque a diferencia de las versiones anteriores, diseñadas con soporte para Android, el Mate 70 y su HarmonyOS Next requieren la adaptación de aplicaciones, tanto chinas como extranjeras, a este nuevo sistema operativo. Y Gary Ng, economista de Natixis, afirmó a la AFP que “HarmonyOS es el primer sistema operativo interno” y representa “un hito histórico en los esfuerzos de China por reducir su dependencia del software occidental”.
Para colmo, las ventas comenzaron el martes por la tarde en China poco después de las 6 p.m. Y una hora antes de la apertura oficial de los pedidos, un centenar de personas ya hacían cola frente a una tienda de Huawei en el centro de Pekín.
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