Hace casi un año, Kiwi nació en un zoológico de España. Pero su madre la rechazó. Al fracasar todos los intentos de adopción, se decidió colocar a la pequeña hembra en Monkey World, en Wareham, en el sur de Inglaterra, que es la guardería especializada en orangutanes de Europa.
Para cruzar el Canal, de Calais a Dover, la mimamos, ya que la instalamos en primera clase en el ferry para evitar estrés. Hizo este viaje de 90 minutos con sus cuidadores, explica la BBC.
“No todos los días tenemos un orangután a bordo y fue un día especial para nuestra tripulación que dio la bienvenida a Kiwi y le brindó un lugar tranquilo para cruzar el Canal de la Mancha”, comentó Jack Steer, director de operaciones portuarias de P&O Ferries.
En Monkey World, Kiwi se unió a Sibu, un macho de 3 meses transferido en octubre desde el zoológico de Dublín, donde su madre no podía alimentarlo. Luego, los dos serán devueltos a su madre adoptiva, Oshine, un orangután de Borneo rescatado del comercio ilegal de animales en Sudáfrica en 2010.
Con Kiwi y Sibu, Monkey World habrá atendido a lo largo de los años a 13 huérfanos de siete países.