Un nuevo estudio publicado tras una exitosa misión del rover chino Zhurong proporciona nuevas pruebas que refuerzan la hipótesis de que Marte alguna vez estuvo cubierto por un vasto océano. Estos descubrimientos, basados en el análisis de formaciones geológicas, podrían cambiar nuestras ideas sobre el Planeta Rojo y su capacidad para sustentar vida.
¿Un enorme océano primitivo?
Lanzado en 2021, el rover chino Zhurong puso sus ruedas en la región deLlanuras de utopíaen el hemisferio norte. Esta zona ya era objeto de especulaciones sobre la presencia de agua en el pasado. Por tanto, la misión del rover era confirmar estas sospechas aportando pruebas concretas. Ya está hecho (o casi). De hecho, descubrimientos recientes sugieren la existencia de un océano primitivo en Marte.
En detalle, el rover vio varios características geológicas intrigantes. Estas formaciones recuerdan las estructuras que uno podría esperar de las costas de la Tierra, como conos hundidos, canales poligonales y flujos grabados.
Los primeros son estructuras formadas por la acumulación y erupción de lodos, muchas veces ligados a líquidos subterráneos. En la Tierra, este tipo de formación se crea cuando los fluidos del subsuelo, como el agua o los gases, escapan y empujan materiales como el barro o los sedimentos hacia la superficie, formando conos característicos.
Los huecos poligonales son estructuras en forma de polígono que a menudo se observan en terrenos donde el agua o el hielo han jugado un papel importante en la configuración del paisaje. Estas formas son el resultado de procesos como la congelación y descongelación donde se producen fracturas en los materiales debido a la variación de temperatura.
Finalmente, los flujos grabados se refieren a formaciones creadas por el flujo de líquidos, como agua o barro, que dejan una marca distintiva en el suelo. En la Tierra, este tipo de flujo suele ocurrir en ríos o en laderas donde el agua superficial mueve sedimentos. Por tanto, estas formaciones se han interpretado como indicios de una presencia lo suficientemente importante como para haber dado forma al paisaje marciano.
300 millones de años
Según un nuevo estudio, un vasto océano cubría gran parte de Marte hace unos 3.700 millones de años. Este océano habría sido creado por un gran inundación lo que habría sumergido grandes zonas del planeta. Sin embargo, después de varios cientos de millones de años, el océano habría comenzó a enfriarse y congelarsehace unos 3.400 millones de años, formando líneas costeras y costas distintivas a medida que el agua retrocedía. Eventualmente, este océano habría desaparecido poco después.
Hay varias teorías sobre por qué pudo haber sucedido esto. Una de las principales hipótesis es que Marte perdió su capacidad de mantener agua líquida en su superficie debido a la desaparición gradual de su atmósfera. Originalmente, el planeta habría tenido una atmósfera más espesa, capaz de retener el calor y mantener el agua en estado líquido. Sin embargo, debido a la ausencia de un campo magnético protector y a la extinción de su actividad geológica interna, esta atmósfera habría sido erosionada por el viento solar con el tiempo. Como resultado, el agua líquida habría desaparecido, dando paso a un clima cada vez más frío y seco donde el agua restante se evaporaría o congelaría paulatinamente.
Tenga en cuenta que, aunque estos descubrimientos son interesantes, todavía no nos permiten concluir definitivamente que realmente existió un océano en Marte. El equipo de investigadores, aunque entusiasmado, reconoce que Serán necesarias más investigaciones para confirmar estas hipótesis.. Una misión para traer muestras marcianas a la Tierra podría, por ejemplo, proporcionar las pruebas irrefutables necesarias para llegar a esta conclusión.
¿Una posibilidad de una vida pasada?
La pregunta que subyace a esta investigación va mucho más allá de los simples aspectos geológicos. Si Marte alguna vez tuvo un océano, podría significar que el planeta tenía condiciones adecuadas para la vida. De hecho, en la Tierra la vida apareció en ambientes acuáticos, a menudo en océanos primordiales donde los gases y minerales se combinaron para dar lugar a las primeras formas de vida. Si Marte hubiera experimentado un período similar, esto podría aumentar las posibilidades de que hubiera albergado vida o al menos condiciones favorables para su nacimiento.
Sin embargo, algunos científicos, como Benjamín Cárdenas de la Universidad Estatal de Pensilvania, expresan reservas. Cree que elementos como el viento marciano podrían haber erosionado o modificado formaciones geológicas a lo largo de miles de millones de años, lo que podría complicar la interpretación de los datos. Aunque estas críticas son importantes, no cuestionan la hipótesis de un océano marciano, sino que resaltan la complejidad de analizar la evidencia geológica antigua.