Según la DNCG, que pronunció un descenso a la Ligue 2 como medida de precaución, el Olympique Lyonnais tendrá que reponer sus cuentas en los próximos meses. No hay preocupaciones para el propietario John Textor, seguro de su plan, a diferencia del ex Lyonnais Claudio Caçapa.
Según John Textor, la DNCG no se preocupa por nada. El enorme déficit del Olympique Lyonnais llevó a la policía financiera a lanzar graves amenazas, como la degradación a la Ligue 2, como medida de precaución. Pero, por su parte, el propietario del club del Ródano asegura que los ingresos futuros de su holding cubrirán los huecos. Su argumento no fue suficiente para convencer a la organización, ni tampoco a Claudio Caçapa.
Textor fait flipper Bolsillo
El brasileño, ex entrenador asistente en el Lyon y luego entrenador interino en el Botafogo antes de su paso por el banquillo del Molenbeek, ha viajado bastante por la galaxia Águila. Sin embargo, el plan de John Textor sigue siendo un enigma a sus ojos. “ Es complicadoconfió el ex central del OL al Tribune de Lyon. ¡Por eso ni siquiera estoy tratando de averiguarlo! ¡Porque de todos modos no lo voy a entender! No sé cómo lo hace. Hay que saberlo todo en Crystal Palace, Molenbeek, Botafogo, OL… ¡Tienes que dominarlo todo! »
En la vaguedad, Claudio Caçapa se limita a señalar que la DNCG no valida el discurso del estadounidense. “ Da miedo. Me temo quereconoció el técnico actualmente libre. Es como las finanzas en casa: tengo una deuda de 1.000 euros, no es nada. Pero un mes después son 1.100, un año después 3.000. ¡Ahí son 500 millones! Cuando miramos a Burdeos… Empezaron así. John dice que está tranquilo, que no tiene miedo. Él sabe de dónde va a venir este dinero. Tienes que confiar en él. »
En el holding todo el mundo cree en el plan de John Textor. “ estan obligadostestificó Claudio Caçapa, mientras que el policía financiero ve las cosas de otra manera. La DNCG hace su trabajo, pero el entrenador, los jugadores, el staff… Cuando tengo contacto con la gente del club, no hablamos de eso. Pensamos, imaginamos, pero no podemos ir más allá. Tienes que confiar. ¡Nadie entiende todo esto excepto él! Él es quien tiene la llave, quien conoce las maniobras que ha realizado. » Hasta ahora, la serenidad del empresario no siempre ha sido una garantía.